Mi valija tiene espónsor

Esperando el equipaje en el sinfin de un aeropuerto observé un escenario en donde la oportunidad de emprender un negocio no estaba siendo explotada aún.

El emprendedor cuenta con un público cautivo –nadie se mueve hasta que aparece su propia valija–, muy atento –muchas valijas se parecen entre sí– y a la espera de un objeto preciado: si extraviaron alguna vez su valija saben de que estoy hablando.

Si bien hay publicidad ploteada en las gomas que componen el “gusano” del sinfín, no es allí en donde enfocamos nuestra atención, empero sí lo hacemos, en las valijas.

¿Cómo se podría explotar ese óptimo soporte para avisos publicitarios? Atendiendo a una necesidad comprobada y cubierta de forma parcial por las alternativas actualmente ofrecidas en los aeropuertos. El nuevo emprendimiento de servicios de seguridad y embalaje para equipaje debería ofrecer diferentes alternativas de acuerdo con la solvencia económica del viajante:
-Embalaje con film, como los de la oferta actual pero más económico por estar impresos en el film los logos y mensajes de los anunciantes
-Embalaje con carcaza rígida de plástico resistente, ésta se contrata en el aeropuerto de salida y se devuelve en el aeropuerto de destino en los locales de la companía. De varios formatos y colores –los preferidos por los viajeros– con cerradura con combinación variable y con una o ambas de sus caras ploteada con el mensaje publicitario. Para aquellos que quieren saber en donde está su equipaje en todo momento, la opción de carcaza con GPS estará disponible como servicio premium.

¿Como se sostiene la demanda por el servicio?
-Las maletas van seguras, limpias y no se golpean ni deterioran, asimismo podemos saber en todo momento donde están, hasta cuando las extravía la aerolínea
-El costo es competitivo –lo pagan en parte los anunciantes– y se ajusta al bolsillo de cada viajero por las diferentes combinaciones y alternativas a contratar
-Los tomadores de decisiones en la agencias de publicidad, centrales de medios y los propios anunciantes, son pasajeros frecuentes y ya viven la experiencia que nuestro emprendedor les ofrecerá para anunciar sus marcas.

Sólo queda encontrar un lector emprendedor que pase a la acción.