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Ámsterdam determina el lugar donde creará un centro erótico en vez del Barrio Rojo
Dirigentes municipales de Ámsterdam determinaron este lunes el lugar donde deben construir un "centro erótico", llamado a sustituir las vitrinas del conocido Barrio Rojo de la ciudad neerlandesa.
El Europaboulevard, situado cerca de un barrio de negocios y de una zona residencial del sur de Ámsterdam, "es el lugar más apropiado para un nuevo centro erótico", indicó el Ayuntamiento en un comunicado. Esta decisión se votará en el consejo municipal" a principios de 2024, añadió.
El gobierno municipal defiende este proyecto por los problemas de ruido y criminalidad que hay en el Barrio Rojo debido al masivo turismo y al ocio nocturno que atrae visitantes de todo el mundo, especialmente de otros países europeos los fines de semana.
La iniciativa suscita críticas por parte de las trabajadoras sexuales, que desean seguir trabajando en el Barrio Rojo, pero también de los vecinos de los tres lugares preseleccionados en febrero para acoger el proyecto. Varias peticiones en contra del proyecto recabaron miles de firmas en internet.
El Barrio Rojo de Ámsterdam cuenta con 249 ventanales desde donde se muestran las trabajadoras del sexo. Es uno de los más concurridos de Ámsterdam. Para aliviar la zona, Femke Halsema, la alcaldesa, planeó crear un gran centro erótico alejado del centro con espacio para 100 trabajadores sexuales “sin distinciones de género y orientación”.
Dos de las tres posibles ubicaciones están junto a la feria de muestras y congresos de la ciudad (RAI, en sus siglas neerlandesas). Allí se encuentra también los delegados internacionales que entran y salen de sus instalaciones, a veces tarde por la noche, y se hospedan en los hoteles cercanos.
“El Ayuntamiento quiere aligerar el Barrio Rojo porque le preocupa el ruido, el tráfico de drogas, las borracheras y los desórdenes. Ese mismo efecto negativo puede generarse instalando el centro erótico en una zona adyacente a nosotros”. Agrega que “el Estado anfitrión (en este caso Países Bajos) está obligado a garantizar la seguridad y tranquilidad de las instalaciones, evitando perturbaciones en sus cercanías”.
La alcaldesa Halsema debió salir al cruce de las críticas de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) en marzo pasado. La EMA evalúa las solicitudes de autorización y comercialización de medicamentos en la Unión Europea y su sede es vecina del lugar donde se planea establecer el Centro Erótico.
En un comunicado había expresado: “Lamentamos habernos enterado por la prensa de los planes acerca del centro erótico, cuando el proceso estaba ya en fase de consultas públicas, y sin haber recibido un mensaje directo por parte del Ayuntamiento de Ámsterdam”.
La alcaldesa dijo: “No van a ser vecinos. En el mapa del proyecto puede verse que hay medio kilómetro de distancia entre la agencia europea y el centro erótico”, han recalcado sus portavoces. Han añadido que “las trabajadoras sexuales operarán en el interior del inmueble, y por supuesto que hablaremos con la EMA”.
La prostitución es legal en Países Bajos desde el año 2000, pero no en las calles, y los problemas del Barrio Rojo son recurrentes. Situado en el casco antiguo, las ventanas que atraen a los turistas datan de principios del siglo XX, y fueron aumentando a partir de 1960. Desde 2020, están prohibidas las visitas guiadas para turistas y también el consumo de alcohol al aire libre.
Sin embargo, el enclave sigue bajo presión por el flujo de curiosos, que dificulta la vida de los 4.500 vecinos del lugar. De madrugada, se repiten los gritos y cánticos, el lanzamiento de objetos y el consumo de drogas. La alcaldesa Halsema ha reconocido que “el sexo forma parte de Ámsterdam y no desaparecerá, pero la situación del Barrio Rojo es insostenible”.
Con el centro erótico espera lograr “un espacio que tenga cierta clase y distinción, donde no quepan los delincuentes, y con un programa sobre el erotismo y la sexualidad, con seminarios y talleres sobre salud e inclusión social”.
