El Índice
SURA de Confianza del Consumidor (ICC) registró una baja de 6,7% en marzo, ubicándose en 45,1 y consolidándose en la franja de "moderado pesimismo".
De esta manera, "el ICC del primer trimestre del año revierte la recuperación que había mostrado en el último trimestre del año pasado", destaca la Cátedra SURA de Confianza Económica de la Universidad Católica, encargada de elaborar el índice junto a Equipos Consultores.
La contracción del mes, se explica, es producto de la caída de los tres subíndices que lo conforman. Entre estos, la "predisposición a la compra de bienes durables" es el que experimentó un mayor descenso (18%), seguido por la percepción de la "situación económica personal", que cayó 4,1%, y la "situación económica del país", que bajó 1,9%.
La inflación
A pesar de no verse reflejado en un aumento de la confianza, en marzo los consumidores mejoraron su percepción de la
inflación. El Índice de Expectativas de Inflación del Consumidor (IEIC) bajó 7,2% y llegó a 58,8 a impulso de una sensible baja del Índice de Precios al
Consumo (IPC), que el último mes cayó a 6,7% interanual, ingresando al rango meta del gobierno (entre 3% y 7%) por primera vez desde diciembre de 2010.
De todas formas, según la Cátedra de la Universidad Católica, la baja del IEIC (de 69,9 en marzo de 2016 a 58,8 el mes pasado) es escasa para una inflación que hace un año superaba los dos dígitos. Además, las expectativas permanecen en "zona pesimista", señala el informe. "Posiblemente esa cierta resistencia a la baja de las expectativas se asocie a la incertidumbre acerca del tipo de cambio -variable clave en la caída de la inflación registrada de estos meses-, y a los escasos márgenes de la política fiscal para cooperar con la monetaria", se añade.
Por último se destaca un nuevo aumento de las "expectativas de desempleo", que crecieron 4,2% y sumaron su cuarto mes consecutivo al alza.