Ausente en el Senado pero sin faltas en la cúpula de su sector, Danilo Astori terminó este martes de poner el punto final a una historia de más de 30 años en política. Desde que Líber Seregni lo lanzara al estrellato político y al primer lugar en las siete listas que el Frente Amplio llevó al Senado en 1989 hasta el aislamiento casi total en su casa de Malvín, la salud terminó empujando al dirigente histórico a una renuncia que se veía venir.
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