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El presidente israelí Isaac Herzog condena los ataques de colonos contra aldeas palestinas
Mientras las delegaciones de Israel y Palestina –con la mediación de Jordania, los Estados Unidos y Egipto– se reunían en la ciudad jordana de Aqaba, se produjeron hechos de violencia: primero la muerte de dos hermanos israelíes y luego un ataque masivo de colonos contra palestinos.
Las autoridades de Jerusalén quieren frenar la violencia de los colonos de su país contra un territorio que las propias Naciones Unidas reconocen como gobernado por la Autoridad Nacional Palestina.
El presidente israelí Isaac Herzog expresó su "condena enérgica" al ataque de colonos ultraortodoxos de su país contra palestinos en el norte de Cisjordania ocupada, que costó la vida de un palestino y dejó más de 300 heridos, además de numerosos daños materiales.
"Tomar la ley en sus propias manos, provocar disturbios y cometer actos de violencia contra inocentes no es nuestra manera, y expreso mi enérgica condena a los hechos", señaló el presidente en un comunicado emitido por el gobierno el lunes y despachado por agencias israelíes e internacionales.
Herzog indicó que deben ser las fuerzas de seguridad de su país las que "detengan al despreciable terrorista y restablezcan el orden de inmediato". La referencia es al ataque de un palestino con arma de fuego producido el domingo por la tarde en una ruta del norte de Cisjordania, en territorio palestino, en el que murieron dos hermanos, colonos israelíes, Hilel y Yagel Yaniv, de 22 y 20 años. Ambos vivían en el asentamiento judío de Har Bracha, a pocos kilómetros de Huwara.
Esos asentamientos no son reconocidos por las Naciones Unidas como legales. En la noche misma del domingo, horas después de la muerte de estos jóvenes a manos de un joven palestino, cientos de colonos irrumpieron en las localidades palestinas de Huwara, Burin, Zatara, Odala y Asira al Qabaliyya. Los colonos llegaron armados con cuchillos, palos, piedras y armas de fuego, consigna la agencia alemana DW.
En los distintos ataques, perdió la vida Sameh Hamdala, de 37 años y fueron heridos no menos de 300 palestinos. Los colonos incendiaron al menos 75 casas, de las cuales 35 quedaron totalmente calcinadas. También prendieron fuego a más de un centenar de vehículos.
La oficina del presidente palestino, Mahmud Abás, a través de un comunicado describió el asalto de los colonos como "terrorismo" y responsabilizó al gobierno israelí.
La respuesta de las autoridades israelíes fue llamar a la calma a los agresores que viven en las colonias consideradas como tierras usurpadas por Naciones Unidas. "Pido que, aunque la sangre hierva y los ánimos están calientes, no tomen la ley en sus manos. Dejen que el Ejército y las fuerzas de seguridad hagan su trabajo", llamó este domingo el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, cuando los colonos clamaron venganza tras el ataque palestino. Netanyahu calificó el ataque como "una terrible tragedia" y se mostró confiado en que las fuerzas de seguridad capturarán pronto al responsable. "Juntos venceremos al terrorismo", añadió.
