El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció que buscará la reelección en los comicios de 2024. Antes, sin embargo, deberá impulsar una reforma de la Constitución, texto que en la actualidad no contempla la posibilidad debido a los llamados “artículos pétreos”, situación que podría cambiar de aprobarse la iniciativa que impulsa un equipo liderado por el vicepresidente Félix Ulloa, y que sería eventualmente aprobada por la Asamblea Legislativa, controlada por el oficialista partido Nuevas Ideas.
"He decido correr como candidato a la presidencia”, reveló Bukele en un mensaje transmitido en cadena nacional por radio y televisión a propósito del 201 aniversario de la independencia del país centroamericano, que se celebró con una fuerte presencia en las calles de grupos opositores y organizaciones defensoras de los derechos humanos que rechazan el régimen de excepción con el que el gobierno procura combatir a las pandillas, estrategia que ha generado redadas masivas y excesos por parte de las fuerzas de seguridad.
Aunque la figura de la reelección presidencial está prohibida por los “artículos pétreos”, los analistas locales señalan que el equipo que encabeza el vicepresidente Ulloa tiene muchas posibilidades de conseguir que el texto constitucional sea modificado para habilitar la reelección, ya que el oficialismo controla con holgura la Asamblea Nacional, el órgano legislativo que deben aprobar la propuesta.
El mandatario alegó que su continuidad en el cargo le permitiría al país proseguir el programa de cambios implementados por su administración, y señaló que otros países en democracia reconocen la reelección, recogió la agencia Sputnik. Casi de inmediato una sinfonía de fuegos artificiales resonó en la capital, que durante la mañana había sido escenario de un desfile cívico-militar para conmemorar la independencia y de una marcha de la sociedad civil en contra del régimen de excepción vigente desde marzo pasado.
En julio de este año, el vicepresidente Ulloa advirtió que si Bukele quería ir por la reelección debía dejar la primera magistratura al menos seis meses antes de concluir su mandato, una posibilidad que abrió la corte constitucional impuesta por el oficialismo en septiembre de 2021, paralela al recurso de reforma constitucional.
Por lo pronto, la fecha patria mostró las dos caras de la escena política salvadoreña. Por un lado descollaron los desfiles oficiales de militares y estudiantes que apoyan al gobierno de Bukele, al mismo tiempo que el descontento social se hizo presente con las organizaciones sociales, sindicales y defensoras de los derechos humanos que rechazan el régimen de excepción.
"Alto al régimen de excepción de Bukele dictador", fue la leyenda de una de las pancartas que encabezó la manifestación opositora, según mostró el diario La Prensa Gráfica. Otros asistentes tenían carteles que rezaban “Sin encuestas pagas Bukele no es nada”, o pedían la libertad de detenidos como supuestos integrantes de pandillas.
Bukele, empresario y exalcalde de la ciudad de San Salvador, la capital del país, llegó el poder el 3 de febrero de 2019 al ganar las elecciones presidenciales en primera vuelta con los partidos Gran Alianza por la Unidad Nacional y Alianza con Nuevas Ideas, la coalición que quebró el bipartidismo de la Alianza Republicana Nacionalista y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, las dos agrupaciones que gobernaron en los últimos 30 años.
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