Los perros, considerados los mejores amigos del hombre, comparten con nosotros mucho más que cariño y compañía. En ocasiones, esta convivencia cercana puede ser un canal para la transmisión de ciertas enfermedades de los canes a sus dueños.
Aunque nuestra relación con estos animales es mayormente beneficiosa para nuestra salud física y emocional, es crucial conocer los riesgos asociados para prevenir posibles afecciones. Expertos en la materia, incluidos veterinarios y científicos de reconocidas instituciones, han identificado varias enfermedades que se pueden transmitir de perros a humanos.
La convivencia con perros puede exponernos a enfermedades zoonóticas, es decir, transmisibles entre animales y personas. Estas enfermedades pueden propagarse directamente, a través del contacto con saliva, sangre o picaduras, o indirectamente, por medio de vectores como mosquitos y garrapatas.
Entre las principales enfermedades zoonóticas destacan:
Para minimizar el riesgo de contraer enfermedades transmitidas por nuestros perros, es fundamental adoptar medidas preventivas y de higiene. Estos consejos te ayudarán a proteger tanto tu salud como la de tu fiel compañero:
La información y prevención son nuestras mejores herramientas para proteger tanto la salud de nuestros perros como la nuestra. Consultas regulares al veterinario, prácticas de higiene adecuadas y tratamientos preventivos son esenciales para disfrutar de la compañía de nuestros perros sin preocupaciones adicionales.
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