Geert Wilders, líder de la formación ultraderechista Partido por la Libertad obtuvo una sorpresiva victoria en los ´comicios de noviembre.

Mundo > Marcha atrás

Geert Wilders retira su propuesta de prohibir el Corán y cerrar mezquitas en Países Bajos

Para formar gobierno, el líder ultraderechista que ganó los comicios parlamentarios el pasado 22 de noviembre, busca formar una coalición con tres partidos de centroderecha
Tiempo de lectura: -'
10 de enero de 2024 a las 05:01

Geert Wilders, líder del Partido por la Libertad (PVV), ganó las elecciones del pasado 22 de noviembre en las elecciones parlamentarias de Países Bajos. Resultó una sorpresa que en un país con fuerte tradición democrática triunfara una formación ultraderechista.

El flamante ganador de los comicios necesita una mayoría legislativa para convertirse en primer ministro de ese país monárquico. Una de sus propuestas durante la campaña fue la denuncia sistemática de los inmigrantes, a quienes acusó de ser mayoritariamente musulmanes.

Wilders debió retirar tres proyectos de ley contra el islam para lograr apoyos que le permitan formar gobierno. Ninguna de las tres iniciativas que lograron fuerte adhesión electoral tenía posibilidades de prosperar no solo por falta de consenso de otros partidos sino porque resultan “inconstitucionales”, según el dictamen del Consejo de Estado.

El gesto de Wilders puede ser visto como una aparente disposición a moderarse y poder negociar en mejores condiciones una coalición de derecha. Logró pactar con los otros tres partidos de derecha, que son más tradicionalistas y moderados. Se trata de los Liberales (VVD), Nuevo Contrato Social (NSC) y el Movimiento Campesino-Ciudadano (BBB).

El líder ultraderechista sorprendió en las elecciones del 22 de noviembre de 2023 al convertir a su partido en la formación más votada. Wilders había sido acusado varias veces de incitación al odio.

La primera vez por insultar a grupos religiosos musulmanes fue jugado por “incitar al odio y la discriminación” entre 2010 y 2011 y declarado “no culpable” en junio de 2011. En 2016, volvió a juicio y esa vez sí fue declarado culpable de “incitación y alentar la discriminación” contra los marroquíes, pero no sufrió ningún castigo.

En las elecciones generales de 2017, su partido, el PVV, quedó en segundo lugar, pasando de 15 a 20 escaños. En las de 2021 volvió a quedar en segundo lugar, con 17 escaños. Con esos antecedentes logró la mayoría de votos en 2023 y se dispone a las alianzas necesarias para ser primer ministro del rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos.

Wilders anunció “la congelación” de los tres proyectos en una nota remitida al nuevo presidente del Congreso, Martin Bosma, también miembro del PVV. La primera propuesta incluía prohibir las mezquitas y las escuelas islámicas, así como la impresión, venta y distribución del Corán.

El Consejo de Estado dictaminó que esa iniciativa “pretende demostrar que el islam no es una religión, sino una ideología totalitaria violenta”, lo cual atenta contra “los principios esenciales del Estado de derecho democrático”.

El segundo proyecto contemplaba impedir la doble nacionalidad de los titulares de cargos públicos para que solo tuviesen la neerlandesa y privar del derecho a voto a los ciudadanos con doble pasaporte.

En 2023, había 189.000 ciudadanos de origen marroquí cuyos padres no habían nacido en Países Bajos. En conjunto, esta comunidad suma unos 420.000 miembros. Había también 165.000 habitantes de ascendencia turca en la misma situación, de un total de unos 429.000 ciudadanos de esa comunidad, según datos oficiales.

La influencia de los gobiernos de Marruecos y Turquía en este grupo particular de votantes era el argumento esgrimido por Wilders para aplicar el plan.

Su tercera iniciativa contemplaba la “detención administrativa” de los sospechosos de yihadismo durante un máximo de seis meses, sin intervención de la justicia e incluso antes de una posible condena.

Aunque esas propuestas carecían de suficiente respaldo en el Parlamento, reflejan el ideario sostenido por Wilders a lo largo de su carrera política. Con la victoria electoral del pasado 22 de noviembre, se dispuso  a moderar su mensaje porque quería gobernar “para todos los holandeses”.

Quiso dejar claro que era realista, después de haber utilizado durante la campaña un eslogan tan efectivo como atemporal: “Holanda para los holandeses”. Una consigna en la que metió de golpe a todos los ciudadanos “que se comporten y cumplan las leyes”, sin distinguir, como ha hecho durante décadas, a los que profesan el credo musulmán.

La inmigración es un asunto que ocupa al arco parlamentario en su conjunto. Wilders no renuncia a su rechazo al islam. La noche de las elecciones dijo que es un asunto que “está en el ADN” de su partido.

La primera en reaccionar al anuncio de Wilders fue Caroline van der Plas, líder del BBB, uno de los partidos de derecha que se alían con el líder ultraderechista. Ella calificó de “bonito paso adelante” en una entrevista del diario De Telegraaf.

En caso de lograr los consensos necesarios, esta alianza podrá formar gobierno con Wilders a la cabeza, lo cual parece un hecho según la prensa neerlandesa.

(Con información de agencias)

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...