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Nuestro Sueño ganó todo en la pista de la raza ovina más popular en este Prado
La cabaña Nuestro Sueño vivió una Expo Prado inolvidable: sus propietarios regresarán a San Rosa (Canelones) con las cuatro principales cocardas otorgadas en la pista de calificaciones de la Sociedad de Criadores de Hampshire Down (SCHD).
Esta evaluación genética, a cargo de los expertos Fernando Rovira y Juan García Helguera, ambos veterinarios, tuvo como atracción adicional en 2023 que fue la jura de la raza con mayor presencia entre los ovinos, 88 ejemplares, por encima de varias razas también en gran desarrollo como Texel y otras de alto valor por su trayectoria y potencial, como Corriedale y Merino Australiano.
Nuestro Sueño, a cargo del joven cabañero Matías Núñez, se quedó con los cuatro títulos de Gran Campeón y con los dos premios especiales:
- Gran Campeona PO brete 1026
- Gran Campeón PO y Mejor Tren Posterior brete 1013
- Gran Campeona PI y Campeona Suprema brete 998
- Gran Campeón PI y Mejor Res Carnicera brete 960
Núñez, apenas dejo de recibir uno de los varios abrazos que fue cosechando primero en el Ruedo Central y luego en La Manguera (la jura debió mudarse cuando a media tarde comenzó a llover en forma muy intensa), indicó a El Observador que era “imposible” encontrarle palabras a lo que sentía, porque es la cuarta asistencia a una muestra ganadera de la Asociación Rural del Uruguay (ARU) en el Prado y si bien habían sacado ya algún Gran Campeón, nunca más de uno en un mismo año y menos obviamente cuatro juntos, algo que muy poquitos en la historia deben haber conseguido.
“La idea era criar ovejas, no pensábamos tener una cabaña, ahora nos dedicamos a la genética, nos gusta eso y esta es la raza que le gustó a nuestros padres y a nosotros también”, dijo Matías, quien está al frente de las diferentes labores con la colaboración de sus dos hermanos y el gran respaldo de sus padres Daniel y Cecilia, admitió que “todo esto es un premio muy lindo por tanto esfuerzo que se hace y sobre todo en un año que fue tan complicado por la sequía”.
El secreto de los caramora
Washington Pereira Soares, presidente de la sociedad de criadores, habló con El Observador sobre la creciente presencia de la raza en la Expo Prado: “Hace varios años que venimos creciendo, andábamos en 40 o 50 animales, pasamos a cerca de 70 y 80, ya el año pasado pasamos a 104 inscriptos y este año fueron 108 y confirmaron 88, venimos todas las razas carniceras creciendo, este año hubo muchos Texel, Ile de France, Poll Dorset también, las razas de carne están en punta, sin dudas”.
Sobre el valor de los “caramora” –así se denomina a los Hampshire Down–, lo definió del siguiente modo: “Es una raza que se vende sola, con características maternales excepcionales, mucha precocidad, las corderas al año están pariendo fácilmente, sin problemas, tienen una altísima tasa de mellizos y lo normal, con pariciones sin cuidados, andan en el 120% de señalada y si se utilizan determinadas herramientas llegan a 150% y eso es un enorme volumen de corderos que la raza da permanentemente, pero además es un animal rústico, sumamente sano, con machos con un lívido espectacular que los hace trabajar a campo sin problemas”.
A todo eso, complementó, “le sumamos la calidad de una carne ovina única, marmoleada, con una terneza y sabor espectacular, fuera de lo común, por eso la raza se impone cada vez más”.
Los cabañeros, resaltó, están constantemente importando genética desde Australia, Nueva Zelanda y Argentina con inversiones muy trascendentes que explican la calidad que los jurados elogiaron en la pista luego de definir cada categoría, mencionó.
“Nuestro objetivo como directiva, ahora que sentimos que la raza está sólida, impuesta y creciendo, es apostar a tener más presencia en el norte del territorio, porque esta raza en particular tiene muchos criadores y cabañas en el sur, por ejemplo en Maldonado, Lavalleja y Canelones, pero sin esa presencia por ahora al norte del Río Negro”, informó.
Pereira Soares habló sobre el valor de los reproductores, que en el caso de un carnero de punta, mejorador, para uso en cabaña, puede andar en US$ 1.500 y US$ 2.000 como base, con animales para trabajar en el campo desde US$ 500 por ejemplar.
Finalmente agradeció al jurado, el Dr. Rovira del Instituto Nacional de Carnes (INAC), experto en la temática genética para carne y por ende una persona muy indicada para guiar con sus decisiones sobre todo lo carnicero, y al Dr. Rovira, que por algo, remarcó, tiene un historial con 12 grandes campeones en la Expo Prado y además 18 reservados de grandes campeones en la raza.
Para conocer el resto de los veredictos en esta y en las otras razas ya calificadas hay que ingresar en este enlace.
