Por definición el agua potable que recibimos en nuestras casas debe ser incolora, inolora e insípida, y en medio de una sequía que afecta al país y que ha dejado a parte del sur, como es el Área Metropolitana, con problemas de suministro de agua potable, agua con gusto a sal y con olor, eso no pasa. Pero en el norte la situación es diferente, el agua no falta, es potable y bebible. Parte de eso se da porque uno de los suministros de agua está dentro de un paisaje protegido bajo el Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP), donde el agua es pura.
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