Murano está establecido en un edificio antiguo, típico del barrio -de los que cada vez van quedando menos-, de techos y aberturas altas, molduras en la unión del cielo raso y la pared, y lámparas en forma de candelabro, que penden del techo y caracterizan al local.
A la entrada, nos encontramos con una barra corta, tras ella se descubre la parrilla, y más atrás la cocina.
La sala se divide en tres ambientes: el principal en planta baja, otro en la planta superior, y una terraza en el frente, sobre la calle Herrera y Reissig, con vista a la plazuela Anita Garibaldi.
A LA CARTA
En una visita anterior, ya tuvimos la oportunidad de probar la parrilla de Murano –de muy buen nivel- por lo que en esta cena, y motivados por la nueva oferta gastronómica, pedimos platos de cocina como principales.
Al sentarnos a la mesa, nos acercaron una panera y un dip “marca de la casa”, riquísimo, que a mi juicio es la fusión perfecta entre la salsa golf y la salsa criolla. Vale la pena acabarse el pan con esta salsita.
Como pica-pica sí optamos por platos salidos de la parrilla: una porción de mollejas y un provolone. El provolone estuvo rico, y las mollejas superlativas. Tiernas, jugosas, y exquisitas.
De las mejores que hayamos probado.
Mientras, descorchábamos un Tannat 2010 de bodega Bouza, siempre redondo.
Como principales, tomamos las Fajitas de Res al Ajillo, y el Chop Suey de Cerdo.
Las fajitas, en salsa española, estaban muy sabrosas. El único pero, esperábamos que vinieran acompañadas de una tortilla de maíz que el plato no contempla.
Por el otro lado, el Chop Suey de Cerdo sublime, muy disfrutable. La nota negativa, la guarnición, un timbal de arroz blanco poco aromático y en esa oportunidad pasado.
Las porciones -todas ellas, entradas y principales- fueron harto generosas, por lo que la carta de postres la salteamos, para recalar en dos infusiones de hierbas y arándanos, sanamente digestivas.
SOBREMESA
Murano sorprenderá en lo gastronómico a quien decida visitarlo.
La cocina es de gran factura, con platos elaborados con fundamento.
Recetas concretas y rendidoras, abundantes, que la mayoría agradece.
El servicio es correcto y atento.
El local es cómodo, luminoso por el día, pero algo fusco de más por la noche.
Ofrece la oportunidad de disfrutar de almuerzos primaverales al aire libre en su terraza, y acceso directo para los ciclistas, por la recientemente inaugurada ciclovía universitaria, que pasa justo enfrente del local.
MOZO, LA CUENTA
Mollejas: $ 180; Provolone: $ 150; Tannat 2010 de Bouza: $ 490; Agua sin gas: $ 45; Fajitas de Res: $ 300; Chop Suey de Cerdo: $ 330; Cubierto: 60 (x2); Infusiones: invitación de la casa para todos los comensales.
Total de la cuenta para dos: $ 1.615, con el descuento al contado del 15%: $ 1.373
Precio por comensal: 686 pesos
Murano está ubicado en Herrera y Reissig 957 y Gonzalo Ramírez
El horario de atención al público es de Martes a Sábado de 12 a 01 horas; y los Domingos entre las 12 y las 16:30 horas
Teléfono para reservas: 2 411 68 95.
Se puede ver la carta, ubicación y una galería de fotos de Murano en este enlace.
El cupón de descuento se puede obtener aquí.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá