Los cambios del gobierno al proyecto de Rendición de Cuentas no fueron suficientes para convencer al PIT-CNT que, incluso evaluando como “positivas” las modificaciones al ajuste fiscal, mantiene por ahora el paro general de 24 horas a fin de mes. “Lo más probable es que haya una movilización general”, dijo ayer el presidente de la central, Fernando Pereira, en conferencia de prensa.
Pero la decisión no está cerrada y el gobierno tiene una oportunidad más de cambiar la posición del PIT-CNT. Para eso, el ministro de Economía, Danilo Astori, tendrá que convencer a los sindicalistas en una reunión que mantendrán hoy y en la que la central planteará sus reivindicaciones. Allí intentarán “generar condiciones para que el gobierno asuma políticas concretas”, dijo Pereira.
El resultado de esta reunión, así como los restantes anuncios del gobierno, serán evaluados el próximo viernes 17 de junio por la Mesa Representativa del PIT-CNT y se terminará de definir si el paro general previsto para el 29 de junio se concreta.
Desde el principio, el incremento al Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) que el Ministerio de Economía (MEF) formuló para hacer frente al déficit fiscal no conformó a la central, que de inmediato anunció medidas de protesta. En los días siguientes, el Secretariado Ejecutivo propuso llevar a cabo un paro general de 24 horas en rechazo al aumento. De efectuarse, sería el segundo paro de 24 horas en la actual administración de Tabaré Vázquez y el primero del año.
La semana pasada Vázquez acordó con la bancada del Frente Amplio modificar algunos de los puntos más cuestionados del proyecto. Fue así que se decidió suspender el incremento impositivo a quienes ganan entre $ 33 mil y $ 50 mil, y dividir en dos la franja salarial siguiente que va de los $ 50 mil a los $ 167 mil.
Aunque estos dos cambios coinciden con los pedidos que el PIT-CNT hizo al equipo económico, hay aspectos del proyecto que todavía les rechinan, como el régimen de deducciones. Pero, sobre todo, lo que considera el PIT-CNT es que, incluso con los cambios, la propuesta continúa gravando más al trabajo que al capital. “No se cumplió con el 100% de la demanda del PIT-CNT, pero hubo un determinado avance. Ahora, sigue habiendo un problema: no paga más el que tiene más, sino el que más gana”, dijo Pereira.
A las dudas sobre la nueva propuesta del gobierno se suman otros reclamos: la modificación de las pautas salariales y la suba “abusiva” de algunos precios.
El lunes la central inició una serie de movilizaciones callejeras para advertir a la población sobre estos aumentos y con el objetivo de que el gobierno tome medidas. Para eso repartieron volantes cerca de una de las sucursales de Tienda Inglesa y prevén hacerlo en el resto de las grandes superficies, detallando una lista de 50 productos de consumo básico que en el último año subieron su precio muy por encima de la inflación. Según Pereira, en los días siguientes una veintena de movilizaciones similares se realizarán en distintos puntos de Montevideo.
Al mismo tiempo y de cara al comienzo de los Consejos de Salarios, el PIT-CNT retomó su reclamo salarial y solicita que se cambien las pautas salariales y correctivos dispuestos por el MEF. Consideran que tal como están solo garantizan la pérdida del salario real de los trabajadores.
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