Por recomendación médica, exprisionero de Guantánamo será internado nuevamente

Diyab convocó a la prensa a través de allegados al lugar donde vive actualmente. Allí se lo pudo ver en su cama, muy débil, esperando para poder comunicarse con su familia vía Skype.

Más temprano un médico de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) controló a Diyab y le informó que debía ser trasladado a un hospital. Sin embargo, el refugiado se negó hasta tanto no hablara con su familia.

Según dijo a la prensa Andrés Tomas Conteris, integrante del grupo estadounidense "Testigos contra la tortura", un movimiento creado a favor del cierre de Guantánamo y para apoyar a los prisioneros que son liberados, la esposa de Diyab lo vio "muy deteriorado". Contreris leyó la traducción del árabe al español de un mensaje de Diyab en el que reafirmaba su intención de irse de Uruguay a un país preferentemente de habla árabe, aunque también manejó la posibilidad de viajar a Venezuela.

Tal como hizo hace dos días en un mensaje difundido en Youtube desde su cama, Diyab enfatizó que no terminará con la huelga de hambre hasta que el gobierno uruguayo le asegure que podrá dejar el país.

Cristina Mirza, nexo entre los seis refugiados y el gobierno, sostuvo que el gobierno está manteniendo contactos "al más alto nivel" por este tema, aunque prefirió no dar detalles. "Está haciendo gestiones a los efectos de buscar una opción viable en el sentido que él (Diyab) ha planteado desde un principio", indicó y dijo que se está haciendo gestiones con países árabes y "otras paralelas" para encontrar una solución rápida. "Lo que más le interesa al gobierno es evitar que su salud se siga deteriorando", dijo.