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Seis horas de debate sobre militares, balas, traidores y el fantasma de Amodio
El Frente Amplio respaldó a Fernández Huidobro en la interpelación por el robo de municiones
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28 de julio de 2015 a las 05:00
En la primera hora de sesión, la interpelación al ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, ya estaba saldada. El diputado interpelante Jaime Trobo (Partido Nacional) había preguntado lo que tenía que preguntar acerca del asunto que lo preocupaba, y el exguerrillero devenido funcionario había contestado lo que tenía para contestar.
Tras seis horas de debate, previsiblemente el ministro fue respaldado por los 50 diputados del Frente Amplio -y por un inesperado colorado- y cuestionado por cuarenta legisladores de la oposición.
La convocatoria tuvo como objeto el faltante de 20 mil municiones 7,62 -usadas por fusiles de guerra- de la base Santa Bernardina de la Fuerza Aérea, ubicada en el departamento de Durazno. El hecho tuvo un antecedente particular puesto que en el 2001 fue Fernández Huidobro el que, como legislador, interpeló al entonces ministro de Defensa, el colorado Luis Brezzo, por un robo de una cantidad de balas similar pero de una dependencia de la Armada.
El episodio terminó con la renuncia del comandante de esa fuerza, Francisco Pazos.
Ese episodio fue recordado por Trobo al inicio de su interpelación en la que aclaró que su intención no era atacar a las Fuerzas Armadas sino "perseguir a los corruptos".
Según dijo el parlamentario, el hecho denunciado es tan grave que en la base de la Fuerza Aérea quien le pasó el dato del robo es considerado "traidor" y se lo quieren hacer "pagar".
Entonces, el ministro Fernández Huidobro contestó que su cartera denunció el "grave" robo una vez que el diputado hizo un pedido de informes sobre el hecho. "Hicimos la denuncia en la seccional más próxima así como en la Justicia militar", dijo Fernández Huidobro desde su silla de ruedas y ante un atril preparado especialmente para que acomodara el micrófono y sus papeles.
A su vez, Trobo alertó acerca de que las municiones podían estar en manos de "la mafia", de "narcotraficantes" e incluso del "grupo Geo". Los frenteamplistas defendían al ministro y la oposición consideraba que no estuvo a la altura de las circunstancias.
Pero poco a poco el debate comenzó a tomar otros rumbos. El diputado blanco Federico Casaretto habló del presunto "traidor" mencionado por Trobo y, sin que viniera mucho a cuento, metió en la conversación el nombre del extupamaro Héctor Amodio Pérez y a sus declaraciones sobre el pasado de la guerrilla.
Fernández Huidobro asumió la alusión y señaló que Amodio Pérez "está en el círculo del infierno de Dante" dedicado a los peores traidores. Más tarde, Jorge Gandini y Gustavo Penadés (Partido Nacional) advirtieron que los diputados titulares del Frente Amplio que mandaron a sus suplentes faltaron a la sesión para no tener que respaldar a Fernández Huidobro.
El ministro había sido cuestionado por buena parte del Frente Amplio cuando protagonizó un cruce de acusaciones con organizaciones defensoras de los derechos humanos
Es más, Trobo reconoció que tenía esperanzas de que votaran en contra del ministro los diputados Luis Puig (PVP) y Macarena Gelman (Casa Grande) quienes habían sido particularmente críticos con el exguerrillero.
Pero aunque estos parlamentarios faltaron y mandaron a sus suplentes, la izquierda defendió en bloque el accionar del ministro y estuvo sobrada a la hora de comparar sus votos con los de la oposición.
Los cincuenta diputados del Frente Amplio votaron en respaldo a las explicaciones de Fernández Huidobro e incluso el colorado Horacio de Brum se sumó al apoyo. "Como hombre de derecho creo que las explicaciones del ministro fueron satisfactorias. Además, hay varias investigaciones en curso", explicó.
Finalmente, los diputados de la oposición -blancos, colorados e independientes- presentaron una declaración conjunta un tanto vaga en la que no piden directamente la renuncia del ministro ni del comandante de la Fuerza Aérea, Washington Martínez.
"La desaparición de estas municiones y su incierto destino configuran una falta grave de responsabilidad y aptitud para el mando de las jerarquías de la Fuerza Aérea uruguaya. El tratamiento que se le ha dado (al caso) no contribuye al prestigio que debe tener la Fuerza Aérea uruguaya como vanguardia de la patria", señala el documento.
La coordinadora de la bancada del FA, Susana Pereyra (MPP), le puso cierrre a los discursos del oficialismo afirmando que Fernández Huidobro es uno de los hombres más inteligentes y críticos que tiene la izquierda uruguaya.
Tras seis horas de debate, previsiblemente el ministro fue respaldado por los 50 diputados del Frente Amplio -y por un inesperado colorado- y cuestionado por cuarenta legisladores de la oposición.
La convocatoria tuvo como objeto el faltante de 20 mil municiones 7,62 -usadas por fusiles de guerra- de la base Santa Bernardina de la Fuerza Aérea, ubicada en el departamento de Durazno. El hecho tuvo un antecedente particular puesto que en el 2001 fue Fernández Huidobro el que, como legislador, interpeló al entonces ministro de Defensa, el colorado Luis Brezzo, por un robo de una cantidad de balas similar pero de una dependencia de la Armada.
El episodio terminó con la renuncia del comandante de esa fuerza, Francisco Pazos.
Ese episodio fue recordado por Trobo al inicio de su interpelación en la que aclaró que su intención no era atacar a las Fuerzas Armadas sino "perseguir a los corruptos".
Según dijo el parlamentario, el hecho denunciado es tan grave que en la base de la Fuerza Aérea quien le pasó el dato del robo es considerado "traidor" y se lo quieren hacer "pagar".
Entonces, el ministro Fernández Huidobro contestó que su cartera denunció el "grave" robo una vez que el diputado hizo un pedido de informes sobre el hecho. "Hicimos la denuncia en la seccional más próxima así como en la Justicia militar", dijo Fernández Huidobro desde su silla de ruedas y ante un atril preparado especialmente para que acomodara el micrófono y sus papeles.
A su vez, Trobo alertó acerca de que las municiones podían estar en manos de "la mafia", de "narcotraficantes" e incluso del "grupo Geo". Los frenteamplistas defendían al ministro y la oposición consideraba que no estuvo a la altura de las circunstancias.
Pero poco a poco el debate comenzó a tomar otros rumbos. El diputado blanco Federico Casaretto habló del presunto "traidor" mencionado por Trobo y, sin que viniera mucho a cuento, metió en la conversación el nombre del extupamaro Héctor Amodio Pérez y a sus declaraciones sobre el pasado de la guerrilla.
Fernández Huidobro asumió la alusión y señaló que Amodio Pérez "está en el círculo del infierno de Dante" dedicado a los peores traidores. Más tarde, Jorge Gandini y Gustavo Penadés (Partido Nacional) advirtieron que los diputados titulares del Frente Amplio que mandaron a sus suplentes faltaron a la sesión para no tener que respaldar a Fernández Huidobro.
El ministro había sido cuestionado por buena parte del Frente Amplio cuando protagonizó un cruce de acusaciones con organizaciones defensoras de los derechos humanos
Es más, Trobo reconoció que tenía esperanzas de que votaran en contra del ministro los diputados Luis Puig (PVP) y Macarena Gelman (Casa Grande) quienes habían sido particularmente críticos con el exguerrillero.
Pero aunque estos parlamentarios faltaron y mandaron a sus suplentes, la izquierda defendió en bloque el accionar del ministro y estuvo sobrada a la hora de comparar sus votos con los de la oposición.
Los cincuenta diputados del Frente Amplio votaron en respaldo a las explicaciones de Fernández Huidobro e incluso el colorado Horacio de Brum se sumó al apoyo. "Como hombre de derecho creo que las explicaciones del ministro fueron satisfactorias. Además, hay varias investigaciones en curso", explicó.
Finalmente, los diputados de la oposición -blancos, colorados e independientes- presentaron una declaración conjunta un tanto vaga en la que no piden directamente la renuncia del ministro ni del comandante de la Fuerza Aérea, Washington Martínez.
"La desaparición de estas municiones y su incierto destino configuran una falta grave de responsabilidad y aptitud para el mando de las jerarquías de la Fuerza Aérea uruguaya. El tratamiento que se le ha dado (al caso) no contribuye al prestigio que debe tener la Fuerza Aérea uruguaya como vanguardia de la patria", señala el documento.
La coordinadora de la bancada del FA, Susana Pereyra (MPP), le puso cierrre a los discursos del oficialismo afirmando que Fernández Huidobro es uno de los hombres más inteligentes y críticos que tiene la izquierda uruguaya.
