Uruguay logra alinear al Mercosur en su reclamo de más flexibilidad

Los nuevos vientos políticos en la región renovaron las críticas de Uruguay al Mercosur y generaron un mapa con alineamientos de los socios para impulsar la liberalización del comercio y una agenda externa no solo con la Unión Europa. En el capítulo internacional, los presidentes quisieron enviar un mensaje claro de que se saldrá a buscar mercados. Los posicionamientos también cambiaron a la hora de discutir lo que ocurre en Venezuela y sobre el punto se enfrentaron Argentina y Brasil.

La victoria de Mauricio Macri se notó en la cumbre del Mercosur que terminó ayer en Asunción, la capital paraguaya, con un fuerte contrapunto entre el argentino y Delcy Rodríguez, la canciller de Nicolás Maduro, presidente venezolano que no asistió a la cita (ver página siguiente).

Uruguay se afirmó en sus críticas sobre el funcionamiento del bloque que, de acuerdo a un relevamiento con empresarios consultados por los países socios, tiene 81 trabas comerciales, arancelarias o de otro tipo que frenan el comercio. "Al Mercosur lo criticamos de frente", afirmó el presidente Tabaré Vázquez al asumir la presidencia por seis meses del bloque regional.
En la cumbre de presidentes, la número 49, que se desarrolló en la sede de la Conmebol, se vio como los presidentes asumieron posiciones que los mostraron en dos grupos.

Si se los ubica por ideología, Argentina y Paraguay se ubican del centro a la derecha; Brasil y Uruguay del centro a la izquierda; y Venezuela más a la izquierda. Ese posicionamiento no fue lineal cuando se trataron temas económicos. La delegación de Uruguay, que encabezó Vázquez, sintió que luego de tanto remar había conseguido algo. Macri –como tantas veces propuso Uruguay– habló de "flexibilizar" el bloque regional y de tener "previsibilidad" en las reglas de juego. Brasil apoyó y, a través de su presidenta Dilma Rousseff, se mostró a favor de "eliminar las barreras comerciales".

Y Horacio Cartes, el mandatario paraguayo formado en el mundo empresarial, se quejó de que la "libertad de tránsito" de mercaderías "sigue siendo un derecho quebrantado". Propuso incluso "retornar a los principios fundacionales del Mercosur" cuando 25 años atrás –se cumplen en marzo de 2016– se formó la asociación aduanera para facilitar el comercio y la libre circulación de las personas. Las posiciones fueron otras cuando se trató la situación de los derechos humanos en Venezuela.

Vino y se fue

Temprano, en una avión de la Fuerza Aérea, llegó a Asunción el presidente Tabaré Vázquez con Álvaro García, el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto. Desde hace un par de días ya estaban en esta ciudad los ministros Rodolfo Nin Novoa (Relaciones Exteriores) y Danilo Astori (Economía).

Vázquez fue crítico del Mercosur, que "está un tanto fatigado" y propuso "ir a las causas" de esa fatiga para reconocerlas y abordarlas. También pidió un sinceramiento sobre el funcionamiento del bloque, término que puede ser antipático, dijo, pero más lo es hacerse "los distraídos". Para el presidente, el Mercosur también tiene insuficiencias en su agenda externa, a tal punto que solo 11% de las resoluciones de los últimos dos años refieren a la vinculación del bloque con el exterior. "Queremos aproximarnos", dijo Vázquez, a la Alianza del Pacífico; a la Asociación de Estados del Caribe; y finiquitar las negociaciones con la Unión Europea para la cual "ya estamos listos", comentó. El canciller de Paraguay añadió a su vez que además de Europa se buscarán acuerdos con Rusia, Japón, Canadá y ampliar el vigente con India.

Luego de la reunión que se realizó en la sede de Conmebol y la tradicional "foto de familia" que se toman los mandatarios, Vázquez se dirigió al aeropuerto sin hablar con los periodistas.
El vínculo con Europa fue abordado por los demás mandatarios. Hasta ahora Argentina complicaba la negociación que está en su etapa final.

Macri marcó que no quiere "dos velocidades" en la negociación con Europa. "Iremos todos juntos apretando el acelerador", afirmó. Es que Uruguay, con Cristina Fernández de Kirchner frenando el acuerdo, propuso que avanzaran primero los países que estuvieran en condiciones de hacerlo y luego los que quedaran rezagados. Brasil se había acoplado a esa idea pero luego cambió de opinión.
Cartes habló de relanzar el relacionamiento externo con la Unión Europea y dijo que el Mercosur ya está en condiciones de intercambiar ofertas. Rousseff, que enfrenta una situación política complicada en su país que la puede llevar al juicio político, informó que Brasil quiere concluir el acuerdo con Europa. Según pudo saber El Observador, la propuesta del Mercosur libera en promedio el 85% de la oferta exportable. l