Advierten falta de médicos para atender emergencias en accidentes

En Uruguay se lesionan 81 personas por día en accidentes de tránsito, según datos de la Unasev de los primeros nueve meses de 2013. Ariel Bentancur, médico uruguayo radicado en Israel, experto en medicina interna y de emergencia, afirmó que “Uruguay está en pañales en el desarrollo de la medicina de emergencia”.

El experto llegó al país el viernes pasado para disertar ante profesionales y estudiantes de medicina en una actividad organizada por la Filial Shalom de la Organización B’nai B’rith del Uruguay, Unasev y la Embajada de Israel. También se reunió con la ministra de Salud, Susana Muñiz.

Según los datos de Unasev, 22 mil personas resultaron lesionadas en el país entre enero y setiembre de este año. De estos, 431 fallecieron, lo que implica que murió una persona en un accidente de tránsito cada 15 horas. El 55% falleció en una zona urbana y caminos departamentales y 45% en rutas nacionales.

A juicio de Bentancur, estas cifras se explican en gran medida porque Uruguay no tiene un sistema de emergencia adecuado.

La evidencia científica demuestra que la acción sanitaria tras un accidente es capaz de disminuir la mortalidad si ocurre no más allá de los 60 minutos: se le llama “hora de oro”.

Según el experto, los dos puntos en los que hay que trabajar para lograr un sistema de atención de accidentados de calidad –y los que marcaron el eje de su conferencia en el país– son la especialización y profesionalidad en el campo de la emergencia y la importancia del sistema de ultrasonido con este fin.

“Tiene que haber una especialidad en medicina de emergencia y una máquina de ultrasonido en cada emergencia en todos los departamentos uruguayos y en todo hospital de agudos de la capital y de Canelones”, aseguró.

“Hay una profesión que se ocupa del sistema prehospitalario que se llama paramédico o médico de ambulancia y que debe tener una preparación específica para su tarea, que puede ser más corta que la preparación de un médico y más encaminada y enfocada en el servicio de ambulancias, por lo cual se ahorraría en recursos”, precisó Bentancur.

La función de estos especialistas “es tratar el aspecto agudo de toda enfermedad quirúrgica, de trauma físico, problemas psiquiátricos agudos, problemas ginecológicos agudos y problemas pediátricos agudos”.

Bentancur explicó que el equipo de trauma necesario para atender una emergencia de forma eficaz consiste no solamente en contar con un especialista de emergencia sino también con un “cirujano de trauma físico y un cirujano traumatólogo”.

“Lo que hay que hacer es una distribución lógica de los niveles de trauma dentro del país, centros que son nivel 1, en donde hay todas las especialidades de cirugía, hay unidades de tratamiento intensivo, quirófano, anestesistas y médicos de emergencia. Eso hoy en Uruguay no existe, esa distribución no existe, y tiene que haber un aparato de evacuación de los heridos a esos centros”, agregó el experto.

Ultrasonido

La otra punta de un sistema de emergencia de calidad es el uso de tecnología de ultrasonido. Bentancur explicó que la función del ultrasonido es dar información al médico sobre cuál es la fuente de sangrado y posibilitar así la intervención en el paciente.

Además, dijo que hoy su uso “puede contribuir en dirigir la introducción de líneas vasculares que se utilizan en el paciente para resucitarlo con líquidos y con productos de sangre”.

Según el especialista, hoy en Uruguay no se usan equipos de ultrasonido con este fin. Explicó que el costo de un aparato de ultrasonido es de “alrededor de US$ 15 mil, más o menos. Con un millón de dólares se pueden equipar las salas de emergencia de todo Uruguay. En cuanto a la inversión es de costo/efectividad. Es muy importante entender que es el estetoscopio del futuro”, aseguró.

Agregó que considera que debe haber educación a nivel liceal “con respecto a la prevención de accidentes de tránsito y a cómo hacer una resucitación básica”.