IMM estudia dejar horas libres en parques para que los perros corran
Municipios B y CH también analizaron zonas para instalar corrales
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30 de noviembre de 2015 a las 05:00
Luego del discurso de apertura del cabildo abierto en el municipio B (Centro, Cordón, Parque Rodó), dos vecinos, cada uno con su perro y correspondiente correa, se acercaron al intendente de Montevideo, Daniel Martínez y le plantearon su inquietud por la fiscalización de la tenencia responsable de animales que la comuna comenzó a controlar a principios de noviembre.
Ahora ya no se permite que los perros paseen sueltos por los parques, que los de más de 25 kilos vayan sin bozal, o que no se recojan los residuos de los animales, bajo la amenaza de multa. Y eso ha generado algunas resistencias entre los vecinos.
Los reclamos al intendente continuaron en el cabildo del municipio CH (Pocitos, Punta Carretas), donde Martínez reconoció la necesidad de que los perros tengan su espacio para correr. "Hemos pedido a los alcaldes que nos identifiquen lugares y vamos a trabajar para que haya corrales", dijo Martínez a los presentes, y agregó que mientras tanto, la comuna está pensando "en ciertos horarios dejar libres los parques como para que puedan los perros, correr y desarrollarse". Eso, en definitiva, afirmó el intendente, implica también respetar la calidad de vida de los animales y fue aplaudido por el auditorio.
Zonas especiales
Además, otra de las propuestas que se está analizando y está bastante avanzada es la de asignar en los municipios determinados parques y espacios verdes, identificados con cartelería explicativa, donde se podrá dejar a los perros para que corran con libertad, dijo a El Observador el director de Comunicación de la IMM, Santiago Brum. Sería de todos modos bajo responsabilidad del dueño, agregó el jerarca, y "las reglas son las mismas". Es decir que el dueño debe hacerse responsable de recoger las heces del animal y tener precaución con los niños.
El objetivo de la comuna es que antes de fin de año ya estén esos lugares asignados. Entre las posibilidades se cuenta algún espacio verde sobre la rambla o parques con grandes dimensiones, pero no plazas ni espacios públicos muy reducidos.
Además, los municipios B y CH ya entregaron a la comuna los lugares en los que podrían instalarse los corrales.
Más allá de estas ideas para aplicar en determinadas zonas, Brum recordó que se continuará fiscalizando en la vía pública el uso de la correa. Los controles comenzaron el lunes 9 de noviembre, luego de advertir que quienes circulan con canes sin correa, bozal y no recojan los residuos de los perros van a recibir una sanción. Sin embargo, las notificaciones que aplican los inspectores pueden ser apeladas ante la IMM y no en todos los casos se aplicarán las sanciones que van desde $ 1.661 a $ 4.153.
Las personas que recibieron una constatación de infracción tienen diez días para realizar un descargo ante la Inspección General, lo que significa pueden presentar una nota para justificar lo sucedido. La comuna estudiará todos los casos y "ante la duda no se aplica una sanción", dijo días atrás a El Observador el director de la Inspección General, Diego Banizi. "Todo es muy relativo", agregó.
Ahora ya no se permite que los perros paseen sueltos por los parques, que los de más de 25 kilos vayan sin bozal, o que no se recojan los residuos de los animales, bajo la amenaza de multa. Y eso ha generado algunas resistencias entre los vecinos.
Los reclamos al intendente continuaron en el cabildo del municipio CH (Pocitos, Punta Carretas), donde Martínez reconoció la necesidad de que los perros tengan su espacio para correr. "Hemos pedido a los alcaldes que nos identifiquen lugares y vamos a trabajar para que haya corrales", dijo Martínez a los presentes, y agregó que mientras tanto, la comuna está pensando "en ciertos horarios dejar libres los parques como para que puedan los perros, correr y desarrollarse". Eso, en definitiva, afirmó el intendente, implica también respetar la calidad de vida de los animales y fue aplaudido por el auditorio.
Zonas especiales
Además, otra de las propuestas que se está analizando y está bastante avanzada es la de asignar en los municipios determinados parques y espacios verdes, identificados con cartelería explicativa, donde se podrá dejar a los perros para que corran con libertad, dijo a El Observador el director de Comunicación de la IMM, Santiago Brum. Sería de todos modos bajo responsabilidad del dueño, agregó el jerarca, y "las reglas son las mismas". Es decir que el dueño debe hacerse responsable de recoger las heces del animal y tener precaución con los niños.
El objetivo de la comuna es que antes de fin de año ya estén esos lugares asignados. Entre las posibilidades se cuenta algún espacio verde sobre la rambla o parques con grandes dimensiones, pero no plazas ni espacios públicos muy reducidos.
Además, los municipios B y CH ya entregaron a la comuna los lugares en los que podrían instalarse los corrales.
Más allá de estas ideas para aplicar en determinadas zonas, Brum recordó que se continuará fiscalizando en la vía pública el uso de la correa. Los controles comenzaron el lunes 9 de noviembre, luego de advertir que quienes circulan con canes sin correa, bozal y no recojan los residuos de los perros van a recibir una sanción. Sin embargo, las notificaciones que aplican los inspectores pueden ser apeladas ante la IMM y no en todos los casos se aplicarán las sanciones que van desde $ 1.661 a $ 4.153.
Las personas que recibieron una constatación de infracción tienen diez días para realizar un descargo ante la Inspección General, lo que significa pueden presentar una nota para justificar lo sucedido. La comuna estudiará todos los casos y "ante la duda no se aplica una sanción", dijo días atrás a El Observador el director de la Inspección General, Diego Banizi. "Todo es muy relativo", agregó.
