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Desesperación en Boedo: cuatro ladrones armados entraron a una pizzería y asaltaron a los clientes
Cuatro individuos armados irrumpieron en un restaurante en Boedo, despojando a los comensales bajo amenaza de pistola y dejando a tres personas heridas en el tumulto. El incidente violento tuvo lugar después de las 22 horas del miércoles en una pizzería ubicada en México al 3400, entre Virrey Liniers y Maza, en el vecindario de Almagro en la Ciudad de Buenos Aires.
La táctica de los asaltantes consistió en entrar por múltiples accesos para tomar desprevenidos a los presentes en el salón, que se encontraba repleto de clientes, perpetrando el ataque de manera coordinada y agresiva. En medio de la desesperación y el pánico, los comensales se vieron obligados a entregar sus pertenencias sin titubear, mientras que otros optaron por esconderse debajo de las mesas y clamaban por ayuda.
Los agresores no vacilaron en intimidar y golpear a quienes ofrecían resistencia, culminando con el saqueo del dinero, teléfonos móviles y la recaudación del establecimiento. La brutal escena quedó registrada por las cámaras de seguridad del local, evidenciando la violencia con la que actuaron los delincuentes antes de darse a la fuga.
Pocos minutos después, la Comisaría Vecinal 5B de la Policía de la Ciudad recibió una denuncia sobre la presencia de los cuatro criminales en el restaurante, movilizando rápidamente a los agentes. Sin embargo, no lograron dar con los sospechosos, quienes escaparon en un vehículo Ford Fiesta blanco por la calle México en dirección a Sánchez de Loria.
La ayuda del SAME y la investigación para dar con los sospechosos
Los equipos médicos del SAME también acudieron al lugar, atendiendo a tres personas heridas en el cuero cabelludo, las cuales fueron trasladadas al hospital Ramos Mejía para recibir tratamiento.
La Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°57, a cargo del doctor Anselmo Castelli, junto a la Secretaría a cargo del doctor Eduardo Bossie, tomaron intervención en el caso. Tras el violento asalto, se ordenó un exhaustivo relevamiento de las cámaras públicas y privadas con el objetivo de identificar a los delincuentes y proceder con las correspondientes actuaciones legales por robo a mano armada y lesiones.
