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Etiquetado plano de cajas de cigarrillos dividió a la oposición
La Cámara de Senadores dio este martes media sanción al proyecto de ley que prevé el etiquetado plano de las cajas de cigarrillos con los votos de todos los legisladores del Frente Amplio, como era de esperar, pero la oposición quedó dividida.
Mientras que el Partido Independiente y los senadores blancos Jorge Larrañaga, Luis Lacalle Pou y Álvaro Delgado, y el colorado Pedro Bordaberry votaron en contra, otros legisladores blancos como Javier García y el del Partido de la Gente Daniel Bianchi votaron a favor. El proyecto fue aprobado con 23 votos en 30.
La normativa establece un diseño genérico para las cajillas, elimina toda referencia de marcas en el interior y exterior de los productos, y reglamenta el uso de un único color (el marrón), así como los textos, el tamaño de las letras y su ubicación. Las advertencias seguirán ocupando el 80 % del espacio de las cajillas. Las empresas tabacaleras dispondrán de doce meses para concretar las modificaciones.
Las principales objeciones desde la oposición estuvieron relacionadas con las posibilidades, según plantearon, que abre esta normativa para el contrabando. “Tiene un dudoso impacto adicional en la lucha contra el tabaco. Afecta la libertad y la libre competencia”, dijo el senador del Partido Independiente Pablo Mieres en sala.
Lacalle Pou aseguró que la política antitabaco de los gobiernos frenteamplistas ha sido “exitosa” pero opinó que este proyecto “se pasa de rosca”. “Está lejos de seguir ayudando a que se consuma menos tabaco. Se mete en la competencia”, apuntó. Larrañaga y Álvaro Delgado dieron argumentos en el mismo sentido.
Además, Bordaberry cuestionó que el gobierno sea muy duro con el tabaco, lo que consideró positivo, pero no tanto con la marihuana. “Parece que es moderno consumir marihuana y antiguo fumar cigarrillo de tabaco”, dijo.
El proyecto de ley fue votado en el Senado luego de que el presidente Tabaré Vázquez firmara un decreto a mediados de setiembre con las mismas normas que el proyecto. La iniciativa legislativa había sido enviada al Parlamento a principios de 2017 pero como no había avanzado el mandatario decidió continuar mediante decreto.
Una semana después de que Poder Ejecutivo emitiera esa norma, la tabacalera British American Tobacco resolvió solicitar un recurso de amparo ante el juez de lo Contencioso Administrativo, Pablo Eguren, quien en las últimas horas dio lugar al pedido y aceptó el reclamo de la empresa. Los efectos de la sentencia de Eguren solo se aplican a British American Tobacco, por lo tanto las restantes tabacaleras deberán cumplir con el decreto.
Uno de los fundamentos del juez era que las disposiciones debían establecerse por ley. El texto pasó ahora a la Cámara de Diputados, donde deberá ser aprobado para convertirse en ley.
