Once de las cárceles estaban 100% por encima de su capacidad, otras seis por encima del 150% y cuatro por encima del 200%. "En las prisiones más superpobladas, los reclusos dormían en el suelo", aseguró el informe.
El documento también señala que en oportunidades hombres y mujeres fueron recluidos en prisiones mixtas y "asignaron a las mujeres a las peores zonas de las prisiones", esto significó "menos acceso a alimentos, espacios privados y visitas de familiares".
"Algunas prisiones carecían de higiene, acceso suficiente a agua potable, alimentación suficiente o satisfactoria y oportunidades educativas y laborales adecuadas", señalan desde el Departamento de Estado.
Por otra parte, "el 34% de los reclusos en 2021 sufrieron tratos crueles, inhumanos o degradantes, y el 56% de los reclusos no estaban preparados adecuadamente para la integración social al ser liberados", según el relator especial designado por el Parlamento.
"El relator especial y el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP) informó sobre atención médica de rutina y de emergencia inadecuada. Las cárceles carecían de servicios de rehabilitación de salud mental y abuso de sustancias", añade el documento.
Otras cifras en el informe de EE.UU
El informe anual sobre prácticas de derechos humanos también muestra otros indicadores sobre discriminación.
"El 45% de las personas transgénero habrían sufrido violencia debido a su identidad de género", según recoge el informe.
Las mujeres ganan "en promedio un 25% menos por un trabajo similar" que los hombres. Por otra parte "se estima que sólo el 20% de las empresas informaron tener mujeres en puestos de liderazgo".
"Según un informe del Banco Mundial de 2020 sobre exclusión social, los afrouruguayos ganaban un 20% menos que la población en su conjunto por el mismo trabajo", añade el documento.
"Representantes de organizaciones judías informaron de un aumento del antisemitismo en las redes sociales durante el año, incluidos casos de negación y trivialización del Holocausto", explica el informe.
Algunos casos se vieron en "el partido final de la liga uruguaya de baloncesto entre los equipos Nacional y Hebraica, fundado por la comunidad judía, y el partido de la selección nacional de fútbol de Uruguay contra la selección de Israel en las semifinales del Mundial Sub-20".
Sin embargo, "en octubre, los comentarios antisemitas aumentaron sustancialmente tras el inicio del conflicto entre Israel y Hamás".
