La cumbre árabe-islámica pidió el fin de las operaciones militares en Gaza

La cumbre, que reunió a la Liga Árabe (LA) y a la Organización de cooperación islámica (OCI) instó a la Corte Penal Internacional a investigar "los crímenes de guerra y los crímenes contra la humanidad que Israel está cometiendo" en los territorios palestinos, según un comunicado final.

También pidió el fin de la venta de armas a Israel y descartó cualquier resolución política futura del conflicto que separe Gaza de Cisjordania, ocupada por Israel.

Asistieron a la reunión decenas de líderes, entre ellos el presidente iraní Ebrahim Raisi, el presidente turco Tayyip Erdogan, el emir jeque Tamim bin Hamad Al Thani de Qatar y el presidente sirio Bashar al-Assad, quien fue bienvenido nuevamente a la Liga Árabe este año.

El príncipe Mohammed afirmó la "condena y el rechazo categórico del reino a esta guerra bárbara contra nuestros hermanos en Palestina".

"Nos enfrentamos a una catástrofe humanitaria que demuestra el fracaso del Consejo de Seguridad y de la comunidad internacional a la hora de poner fin a las flagrantes violaciones israelíes del derecho internacional", dijo en un discurso en la cumbre.

Por su parte, el presidente palestino, Mahmoud Abbas, dijo que los palestinos se enfrentaban a una "guerra genocida" e instó a Estados Unidos a poner fin a la "agresión" israelí.

Raisi elogió al grupo militante islamista palestino Hamás por luchar contra Israel e instó a los países islámicos a imponer sanciones sobre petróleo y bienes a Israel.

"No hay otra manera que resistir a Israel. Besamos las manos de Hamás por su resistencia contra Israel", dijo Raisi en su discurso.

La guerra trastornó las alianzas tradicionales de Medio Oriente a medida que Riad se involucró más estrechamente con Irán, rechazó la presión de Estados Unidos para condenar a Hamás y suspendió sus planes para normalizar los vínculos con Israel.

El viaje de Raisi a Arabia Saudita es el primero de un jefe de Estado iraní en más de una década. Teherán y Riad pusieron fin formalmente a años de hostilidad en virtud de un acuerdo negociado por China en marzo.

Erdogan pidió una conferencia de paz internacional para encontrar una solución permanente al conflicto entre Israel y palestinos.

"Lo que necesitamos en Gaza no son pausas de un par de horas, sino un alto el fuego permanente", dijo Erdogan en la cumbre.

El emir de Qatar dijo que su país, donde tienen su sede varios líderes de Hamás, estaba tratando de mediar en la liberación de los rehenes israelíes y esperaba que se alcanzara pronto una tregua humanitaria.

"¿Durante cuánto tiempo la comunidad internacional tratará a Israel como si estuviera por encima de las leyes internacionales?" preguntó.

El presidente Joko Widodo de Indonesia, el país con la mayor población musulmana del mundo, dijo que "el hospital de Indonesia en el norte de Gaza sigue siendo el objetivo de los ataques israelíes y se quedó sin combustible".

Agregó que se debe encontrar una manera de hacer que Israel cese el fuego de inmediato y que "la OCI debe utilizar todos los frentes para responsabilizar a Israel por las atrocidades humanitarias que cometió".

La cumbre también exigió el fin del asedio a Gaza, el acceso a la ayuda humanitaria y el cese de la venta de armas a Israel.

El ministerio de Asuntos Exteriores saudita tenía previsto acoger dos cumbres extraordinarias, la de la Organización de Cooperación Islámica y la Liga Árabe, el sábado y el domingo, pero optó por una cumbre conjunta debido a la "extraordinaria" situación de Gaza, dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores saudita.

Algunos países árabes, encabezados por Argelia, pidieron un corte total de las relaciones diplomáticas con Israel, le dijeron dos delegados a Reuters.

Otros países árabes, incluidos Emiratos Árabes y Barein, que establecieron relaciones diplomáticas con Israel no se plegaron al pedido, enfatizando la necesidad de mantener canales abiertos con el gobierno de Netanyahu.