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Uruguay se amigó con el VAR que le anuló un gol por mano a Martínez, sin que ningún celeste se diera cuenta
Minuto 17 del partido entre Venezuela y Uruguay por la séptima fecha de las Eliminatorias para Catar 2022. El lateral Nahuel Ferraresi le tira un pelotazo de 50 metros a Josef Martínez que descuidado por José María Giménez y Diego Godín baja la pelota, gira y marca de pierna zurda. Gol de la vinotinto. Desazón celeste.
La transmisión oficial del partido da por hecho el gol. La pelota vuelve al medio. Cuando de repente el juez brasileño Anderson Daronco hace la seña del VAR y patea la pelota para atrás. Mano. Tire libre para Uruguay. El 0 a 0 vuelve al marcador.
El VAR que manejado por los colombianos Andrés Rojas y Nicolás Gallo perjudicó a Uruguay el pasado jueves en el partido ante Paraguay anulando increíblemente un gol a Jonathan Rodríguez, esta vez actuó rápido y bien para anular el gol de Martínez.
Con Rafael Traci al mando y Braulio Machado como asistente, ambos brasileños, el VAR le avisó inmediatamente a Daronco de la mano de Martínez y el árbitro central anuló el gol sin ni siquiera ir a ver la jugada.
Lo increíble del caso fue que ningún jugador uruguayo se dio cuenta de la mano de Martínez para protestarle al juez ni pedirle que revisara la incidencia.
El equipo pareció sentir un impacto terrible por el error cometido por Giménez-Godín al descuidar a un delantero tan peligroso como Martínez.
Pero la mano fue clara: el delantero amortiguó la pelota con el pecho e inmediatamente después la misma se deslizó por su brazo derecho, luego la acomodó con la mano izquierda y eso le permitió girar para marcar. Perfectamente anulada.
¿Qué reglas se aplicó?
La regla de que cualquier tipo de mano cometida por un delantero anula el gol entró a regir el 1º de julio de 2019.
En junio de 2019, el entonces director del Departamento de Arbitraje Darío Ubriaco le presentó esa y otras modificaciones de las reglas a los clubes locales, aunque al encuentro solo asistieron 20 personas. Uno de los disertantes, Juan Cardellino, explicó la situación de la mano del delantero: “Así sea casual o no, si hay mano y con esa mano se gana ventaja por parte del equipo atacante, se sanciona; si la tiene pegada al brazo no importa”.
Fue un cambio importante porque no es la misma ponderación que se hace de la mano de un defensor donde para sancionar penal por mano se evalúa la posición natural o antinatural de la mano o brazo, el hecho de ampliar o no el radio defensivo, colocarla por encima del hombro, el rebote en una posición cercana que cambia el rumbo del balón inesperadamente, el rebote previo en otra parte del cuerpo del defensor, el hecho de tirarse al piso asumiendo el riesgo de que el esférico pueda pegarle en la mano.
Con los delanteros, la norma alcanza una dimensión objetiva: si hay mano cualquier tipo que sea, es falta y la acción se anula.
En 2020, a partir del 1º de julio, se hizo una nueva modificación sobre la mano del atacante: "En el caso de que el atacante toque el balón con la mano de manera fortuita, únicamente conllevará sanción si la jugada acaba en gol o en una ocasión manifiesta de gol a favor del atacante o su equipo. Es decir, si tras tocar con la mano la pelota, el infractor se desplaza a una distancia muy corta o se dan muy pocos pases".
Con el cambio de regla que operó en 2019 no había quedado claro qué espacio de tiempo debía pasar entre la mano y el gol. Lo que se incorporó a la regla fue el concepto de inmediatez. Es sancionable la mano del atacante apenas antes de anotarse el gol. Pero ahora queda claramente establecido que no será sancionable una mano fortuita de un defensor en su propio campo o en su propia área que genera un contragolpe rápido y que en cuestión de segundos termina en gol.
