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Ley de medios se aprobó en Diputados con el respaldo de la coalición y pasa al Senado en 2024
La Cámara de Diputados aprobó este jueves con los votos de la coalición de gobierno el proyecto de ley para una nueva ley de medios, la última iniciativa considerada central por el Poder Ejecutivo que aún estaba trancada en el Parlamento. El texto deberá tratarse ahora en el Senado en pleno año electoral, donde las conversaciones entre partidos y medios de comunicación cobran especial sensibilidad.
Los partidos Nacional, Colorado, Independiente y Cabildo Abierto cerraron filas para aprobar el grueso del articulado, salvo dos disposiciones que los conducidos por Guido Manini Ríos habían avisado que no acompañarían.
Tras frenar los avances durante los últimos dos años, Cabildo se limitó este jueves a marcar perfil con sus propios aditivos pero no se paró sobre los pedales a la hora de votarlos. El Frente Amplio se opuso bajo la premisa de que es una ley "con nombre y apellido" que beneficia a empresarios que hoy concentran más licencias que las admitidas por la ley vigente.
El gobierno de Luis Lacalle Pou tenía como objetivo derogar esa norma del año 2014, impulsada por la administración de José Mujica. El Ministerio de Industria, conducido entonces por Omar Paganini, intentó en varias rendiciones de cuentas incluir un artículo que dejara sin efectos esa ley que consideran "hiperreglamentarista" y que por la vía de los hechos nunca llegó a aplicarse.
La actual redacción es resistida por el Frente Amplio, el PIT-CNT, la academia y por colectivos especializados del tema que integran la Comisión Honoraria Asesora de Servicios de Comunicación Audiovisual (Chasca).
Cabildo Abierto marcó perfil
Cabildo Abierto marcó perfil este jueves y presentó a los socios dos sustitutivos y un aditivo para incluir en esa nueva ley de medios, que por primera vez en más de tres años logró salir de comisión y someterse a votación en Diputados.
El cabildante Álvaro Perrone firmó un aditivo para crear una "Junta de Garantías en la Comunicación Política" en la órbita del Parlamento que controle que los contenidos de radio y televisión se transmitan "de manera imparcial, seria, rigurosa, plural y equilibrada".
La medida era resistida entre los socios de la coalición que entienden que compromete la libertad de expresión de los medios de comunicación. La creación de este organismo fue, de hecho, una de las principales trabas a las negociaciones que estuvieron a minutos de cerrarse años atrás. Los conducidos por Guido Manini Ríos se pararon entonces sobre los pedales y se negaron a continuar si no se contemplaban sus exigencias.
Este jueves, sin embargo, los cabildantes se limitaron a votar en solitario ese texto y dejar constancia de su postura, por lo que no prosperó.
"La ley garantiza a los actores políticos el derecho a acceder a los servicios de difusión" de manera "proporcional a su representación parlamentaria", establecía el aditivo firmado por Perrone. "Los servicios de difusión regulados por la presente ley tienen el deber de brindar a los ciudadanos información, análisis, opiniones, comentarios y valoraciones de manera imparcial, seria, rigurosa, plural y equilibrada entre los actores políticos y respecto a los mismos".
El general Manini Ríos ha arremetido varias veces contra la cobertura que los medios de comunicación han hecho sobre su partido.
La propuesta cabildante indicaba que la Junta "no se hallará sujeta a jerarquía, tendrá un funcionamiento autónomo, no podrá recibir instrucciones ni órdenes de ninguna autoridad" y que "la Cámara de Representantes regulará sus competencias y funcionamiento y determinará su presupuesto".
Cabildo Abierto pidió a los socios además que las concesiones de licencias para operar medios de comunicación requieran "previa aprobación por la mayoría absoluta de la Asamblea General", en lugar de limitarse exclusivamente a una resolución del Poder Ejecutivo. Esa idea tampoco fue acompañada por el resto de los partidos y naufragó solo con los votos cabildantes.
Otro sustitutivo pretendía agregar una licencia más a las cuatro que el proyecto de ley busca permitir para que un titular o grupo económico pueda ostentar en Montevideo, al tiempo que reduce a cinco el tope para el interior.
La redacción finalmente aprobada sostiene que un titular o grupo económico no puede ostentar total o parcialmente más de cuatro licencias en la zona metropolitana y seis en el resto del país para prestar servicios de radio –ya sea AM y FM– y una licencia para televisión abierta.
