La comisión parlamentaria formada en la Cámara de Diputados decidió este lunes que hay razones jurídicas para iniciar un juicio político contra la presidenta brasileña
Dilma Rousseff, con lo que el trámite pasará ahora a su próxima fase, en el plenario de la Cámara de Diputados, donde se votará la acusación.
La decisión, que supone un nuevo paso hacia un posible juicio con miras a la destitución de Rousseff, fue tomada por 38 votos a favor y 27 en contra, en una comisión formada por 65 diputados que analizó las acusaciones contra la mandataria durante once sesiones.
Durante toda la jornada los diputados se manifestaron a favor y en contra de continuar el proceso, algunos con más fervor que otros. Muchos de ellos llevaban carteles con las inscripciones de "
impeachment ya" o "impeachment sin crimen es golpe", y discutían entre gritos con los opositores.
Se espera que la Cámara de Diputados emita su votación a fines de esta semana. De lograr una mayoría por dos tercios, la presidenta de Brasil deberá alejarse de su cargo por 180 días, durante los cuales el Senado decidirá si da luz verde a su destitución o no.