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UTE ofrecerá energía más barata a hogares cuando tenga excedentes: ¿cómo funcionará el plan?
Cuando termine 2023, el 80% de los clientes de UTE (alrededor de 1,3 millones de servicios) contará con medidores inteligentes de consumo eléctrico. Este tipo de dispositivos permite, por ejemplo, la lectura automática de consumo o el cambio de potencia y de tarifas.
Esta tecnología también abre la puerta a otras prestaciones, como la posibilidad de ofrecer tarifas a la carta adaptadas a los usos finales que el cliente le quiera dar a la energía eléctrica, y que es posible programar y modificar de forma remota.
Como un primer paso, la empresa ofrece desde hace ya algunos años una tarifa inteligente, con precios diferentes según la franja del día, y también fines de semana y feriados.
Ofertas de oportunidad
Para 2024 UTE planea implementar un nuevo producto dirigido a los clientes residenciales sobre la base de paquetes especiales de energía. Estas ofertas se podrán contratar en momentos puntuales del día, cuando la empresa cuente con excedentes, y estarán diseñados para usos específicos en el hogar, como aire acondicionado, secarropa o carga de vehículos, entre otros usos.
La presidenta de UTE, Silvia Emaldi, explicó al programa Quien es Quien, de Diamante FM y Canal 5, que esas “ofertas de oportunidad” se podrán realizar ante todo en los meses de primavera, cuando la producción de energía eólica en el país suele ser mayor.
Antes de poder implementarlo, se deberá contar con datos de “submedición”, es decir tener medido cuánto consume un aire acondicionado o cuánto la carga de un vehículo eléctrico, para diseñar los paquetes a partir de esa información.
¿Cómo sería la contratación?
Antecedentes
En el pasado la empresa pública ya ha realizado planes piloto a nivel de empresas. Años atrás los grandes consumidores tenían la opción de pagar una tarifa variable hora a hora y cuyos precios se conocían con un día de anticipación, por ejemplo.
¿Facturación separada por usos finales en el hogar?
¿Qué tan cerca se está de tener facturación separada por usos finales dentro de un hogar?
Este es otro paso, pero todavía más lejano porque se tendría que tener una submedición específica para el calentamiento de agua, otra para cocción, otra para refrigeración y así para cada electrodoméstico de la casa.
Si bien se están haciendo estudios de la curva de carga y se podría inferir analizando la curva de carga de cada cliente en qué momento prende el aire u otro aparato, eso no sería exacto como para después poder facturar. “Es un objetivo, pero es de mediano plazo. Hay que hilar muy fino y requiere más tecnología más allá del medidor inteligente”, había dicho Emaldi tiempo atrás ante la consulta de El Observador.
