La investigación que intenta dilucidar el paradero de Loan Danilo Peña, el niño de 5 años desaparecido el 13 de junio de 2024 en el paraje El Algarrobal (Corrientes), sumó el jueves una nueva definición del fiscal federal Carlos Schaefer.
El funcionario judicial instó a la Cámara Federal de Apelaciones local a que sostenga el procesamiento con prisión preventiva de todos los imputados, luego de obtener los resultados de la prueba odorífica realizada sobre los vehículos de Carlos Pérez y María Victoria Caillava.
“La prueba odorífica en los vehículos de (Carlos) Pérez y (María Victoria) Caillava y el error que cometieron al pretender plantar un botín (de Loan) en el barro, nos permite afirmar que a Loan se lo llevaron Pérez y Caillava, y tuvieron la disposición del mismo con la participación de de (Bernardino) Benítez, (Daniel Oscar) Ramírez, (Mónica) Millapi, (Laudelina) Peña, (el comisario Walter) Maciel y otros que todavía no han sido identificados”, sostuvo Schaefer en su alegato.
El fiscal se diferenció también de la jueza federal de Goya, Cristina Pozzer Penzo al señalar que desde su punto de vista, no existen elementos para sostener las supuestas amenazas que habría sufrido Laudelina por parte de Caillava y el comisario del pueblo. “Pedirle que no hable es parte del encubrimiento y la participación en la sustracción”, indicó.
Tanto Millapi, el marino Carlos Pérez, su esposa Victoria Caillava, Daniel Oscar Ramírez, Antonio Benítez y su pareja -la tía de Loan- Laudelina Peña, junto al comisario Walter Adrián Maciel, tuvieron, por su parte, a través de sus abogados la posibilidad de responder los términos con los que fueron procesados el 4 de diciembre.
Caso Loan | Los resultados de la prueba odorífica que reforzó una de las pistas de investigación que sigue la Justicia
De acuerdo al fiscal Schaefer, existe hoy un elemento irrefutable, como es la pericia odorológica, es decir, la prueba que arroja el olfato de los perros entrenados y que concluye que en la camioneta de Pérez y Caillava había rastros del chico. Pero (según las defensas) la ventana de tiempo en la que se pudo haber producido ese contacto entre el niño y el vehículo, no se condice con la geolocalización de los teléfonos celulares del marino y su esposa.
No obstante, en la audiencia, también se develaron detalles de una investigación que incluó análisis de dispositivos electrónicos, entrecruzamientos de llamados telefónicos y los informes de los registros de comunicaciones, así como los aportes de más de 200 testigos.
"Al día de la fecha cruelmente estas personas procesadas lo mantienen desaparecido", insistió Schaefer.
Las evidencias demostrarían así que el niño nunca salió de la denominada zona cero y el botín plantado en el barro, arrima a los acusadores a la conclusión de que se lo llevaron. La Cámara cuenta con cinco días hábiles para tomar una decisión, aunque el presidente del órgano Ramón Luis González, anticipó que por lo voluminoso del expediente y la complejidad del caso, el plazo se prolongará.