El Partido Popular (PP) le arrebató al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) la Comunidad de Valencia que podrá gobernar con el apoyo de Vox, al igual que las regiones de Aragón, Extremadura y Baleares.
El bloque conservador consiguió así desplazar a Ximo Puig, que gobernaba la región desde 2015.
Los populares suman 40 escaños, a 10 de la mayoría absoluta, a la que pueden llegar si pactan con el partido de extrema derecha, que obtiene 13 diputados con el 91,41% de los votos escrutados. El PSOE se quedó con 32 (es decir, mejora sus 27 escaños de 2019), Compromiso suma 14 (fueron 17 hace cuatro años) y Unidas Podemos que contaba con ocho diputados se queda afuera de la Asamblea, al igual que Ciudadanos, según el conteo oficial.
La elección en la comunidad valenciana significó un verdadero batacazo, ya que es una región clave que gobernaban desde hace ocho años los socialistas.
Los esfuerzos de Puig en campaña, inclinando su figura al centro para desmarcarse de sus socios más a la izquierda no fueron suficientes para torcer la victoria de Carlos Mazón, el candidato del PP en Valencia.
El partido de Alberto Núñez Feijóo también se impuso con holgura en la Comuna de Aragón, donde obtuvo 28 escaños, y podrá gobernar en alianza con Vox, que ganó 7 diputados. Entre ambas formaciones suman 35 legisladores, uno más de los que se requiere para la mayoría absoluta ya que Las Cortes están formados por 67 diputados. El PP está encabezado en Aragón por Jorge Azcón, que se prepara para administrar la región con la formación de Santiago Abascal.
En 2019, el PSOE fue el partido más votado en esa región y formó gobierno con el apoyo de Podemos-Equo, pero en esta elección los socialistas obtuvieron 23 diputados y Podemos 1, al igual que la Izquierda Unida de Aragón (IUA).
La formación popular también le arrebató la región de Extremadura al PSOE, donde con casi el 90% del voto escrutado, el socialista Guillermo Fernández Vara gana las elecciones —seguido a muy poca distancia del PP—, pero no suma para gobernar.
El PSOE logra 28 diputados, a cinco de la mayoría absoluta. El PP llega también hasta los 28 asientos, pero sí puede sumar con la extrema derecha de Vox, que suma cinco parlamentarios. Unidas Podemos se queda con cuatro y Ciudadanos desaparece.
La cuarta comunidad donde se impuso el PP fue Baleares, donde con el 93,7% escrutado obtuvo 25 diputados y sumará mayoría absoluta si pacta con Vox. Le sigue PSOE con 18 asientos, Vox con 8 escaños, cinco más que en 2019. El Parlamento de las Islas Baleares está formado por 59 diputados, 30 para la mayoría
Pero el vendaval conservador no llegó a la Comunidad de Castilla La Mancha, donde resisten el PSOE. Con el 91% de las urnas escrutadas, los socialistas obtuvieron la mayoría absoluta con 17 diputados, seguidos por el PP, con 12. Ciudadanos desaparece y Vox entra al parlamento con 4 escaños. Las Cortes de Castilla-La Mancha están formadas por 33 diputados, 17 para la mayoría absoluta.
En las elecciones de 2019, los de Pedro Sánchez habían alcanzado 19 diputados, lejos de los 10 del PP, mientras Ciudadanos había llegado a los cuatro escaños.
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