ver más

Un nuevo informe de BBVA Research reveló que Argentina está en un punto de inflexión en materia minera. El litio ya despegó y posicionó al país como tercer productor mundial. El cobre promete inversiones por más de 15.000 millones de dólares que podrían multiplicar por cinco las exportaciones del sector hacia 2032, superando los 25.000 millones de dólares anuales. El Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) ofrece estabilidad fiscal y regulatoria por 30 años. Pero hay una historia paralela que está pasando desapercibida: Argentina posee reservas significativas de minerales críticos para la transición energética —uranio, tierras raras, níquel, cobalto, grafito, manganeso— que apenas están en el radar público.

El documento elaborado por el economista Andrés Gharing, de BBVA Research Argentina, dedicó un capítulo específico a estos "otros minerales" que no ocupan el centro de la escena mediática pero que tienen un potencial estratégico creciente en el contexto de descarbonización global y tensiones geopolíticas por el control de cadenas de suministro.

Uranio: la apuesta nuclear que vuelve

Argentina identificó 33.780 toneladas de uranio, concentradas principalmente en Chubut, Mendoza y Río Negro. En mayo de 2025, la empresa estatal Fomicruz confirmó un nuevo hallazgo en Santa Cruz que reafirmó el potencial de la región. Actualmente el país no registra producción de uranio, pero hay 17 proyectos en distintas etapas de exploración y prospección.

El más avanzado es Ivana, en Río Negro, donde el Grupo Eurnekian invirtió 160 millones de dólares para adquirir el 80% del proyecto. La compañía Blue Sky Uranium está utilizando tecnología de lixiviación in situ (ISR) en Mendoza, un método de bajo impacto ambiental que permite extraer uranio sin excavación masiva.

El contexto global favorece esta apuesta: la demanda mundial de energía nuclear está creciendo, impulsada por el compromiso de varios países de triplicar la capacidad nuclear para 2050. El uranio es esencial no solo para centrales nucleares, sino también para la producción de radioisótopos utilizados en medicina y otras aplicaciones tecnológicas.

Según el informe de BBVA Research, Argentina tiene la capacidad de posicionarse como un proveedor relevante en el mercado global de uranio, aunque los proyectos aún se encuentran en etapas iniciales de desarrollo.

Tierras raras: el talón de Aquiles geopolítico

Las tierras raras son un conjunto de 17 elementos químicos con propiedades eléctricas, magnéticas y térmicas únicas. Se utilizan en turbinas eólicas, vehículos eléctricos, paneles solares, componentes de inteligencia artificial, tecnología de defensa y electrónica avanzada. El problema es que China controla el 70% del mercado mundial y posee el 40% de las reservas globales, con 44 millones de toneladas.

Argentina tiene reservas estimadas de 190.000 toneladas de tierras raras, localizadas en Salta, Jujuy, San Luis, Santiago del Estero, San Juan, Córdoba y la plataforma continental de Buenos Aires. Son cifras menores en comparación con el gigante asiático, pero en un contexto donde Estados Unidos y otros países buscan diversificar su suministro fuera de China por razones de seguridad nacional, cada fuente alternativa cobra relevancia estratégica.

que-son-las-tierras-raras-el-potencial-de-chile-en-la-transicion-tecnologica-1714398855289_512

El informe señala que la multinacional Río Tinto está evaluando inversiones en el sector de tierras raras en Argentina, aunque no hay anuncios concretos todavía. Actualmente el país no tiene producción de estos minerales, pero el potencial geológico existe y la demanda global está en aumento, especialmente por el despliegue de tecnologías renovables.

"Las tierras raras están en el centro del escenario global porque son clave para la transición energética y la tecnología avanzada", advierte el documento de BBVA Research.

Níquel, cobalto y grafito: la trinidad de las baterías

Tres minerales son fundamentales para la fabricación de baterías de vehículos eléctricos y sistemas de almacenamiento energético: níquel, cobalto y grafito. La Agencia Internacional de Energía proyectó que la demanda de níquel se multiplicará por 6,5 entre 2020 y 2040, la de cobalto por 6,4 y la de grafito por 7,7.

Argentina tiene reservas de menos de 10.000 toneladas de níquel, distribuidas en San Luis, Catamarca, La Rioja, Salta y Mendoza. En el caso del cobalto, las reservas son menores a 5.000 toneladas, localizadas en provincias similares. Para el grafito, el país cuenta con 37.500 toneladas de reservas en La Rioja, San Juan y Mendoza, aunque actualmente no lo produce.

Son cifras modestas en comparación con otros productores globales, pero el informe destaca que el potencial está en gran medida sin explorar. La relación entre recursos descubiertos y por descubrir que estimó el Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR) sugiere que podría haber más yacimientos significativos en territorio argentino.

Estos minerales son críticos no solo para la electromovilidad, sino también para tecnologías de energía limpia como celdas de combustible de polímero electrolítico y sistemas de almacenamiento a gran escala.

Manganeso y zinc: la infraestructura energética

El manganeso es esencial para la producción de ferroaleaciones utilizadas en la industria automotriz y de tuberías, además de ser un componente clave en baterías avanzadas. Argentina posee 440.000 toneladas de recursos de manganeso en Mendoza, Salta, Neuquén y Córdoba.

Template-Nota-web-2025-03-14T180124.983-1

El zinc, por su parte, es fundamental para la fabricación de turbinas eólicas. Históricamente, Argentina fue un productor relevante, alcanzando 14.876 toneladas en 2019, pero la producción cayó tras el cierre de la mina Aguilar. El país cuenta con 7 millones de toneladas de recursos de zinc, y proyectos como Puna en Jujuy, de la empresa SSR Mining, están produciendo concentrados del mineral.

El informe de BBVA Research subraya que la importancia de la licencia social para estos proyectos quedó evidenciada en casos recientes, como el rechazo de un proyecto de manganeso en Chile (Los Pumas) por no cumplir requisitos formales, incluyendo la participación de comunidades indígenas.

El desafío de la diversificación

El informe de BBVA Research reconoce que la infraestructura logística sigue siendo un desafío estructural que limita la eficiencia exportadora de todos estos minerales. Sin embargo, la adopción de tecnologías innovadoras como la minería inteligente, la biolixiviación y la lixiviación in situ se presenta como una vía para una explotación más eficiente y sostenible.

El documento concluye en que Argentina se encuentra en una coyuntura estratégica para redefinir su perfil minero, trascendiendo la dependencia histórica del oro, la plata, el litio y el cobre. El potencial geológico está. La demanda global aumenta. El marco regulatorio mejoró. Lo que falta es que estos minerales críticos —hoy en las sombras del radar público— encuentren el camino hacia la exploración, la inversión y la producción a escala comercial.

Temas:

Litio cobre Argentina BBVA Research

seguí leyendo