El ministro de Defensa, Luis Petri, junto a los máximos jefes militares del país, ha puesto en marcha un importante despliegue militar en la ciudad de Rosario en apoyo a la lucha contra el narcotráfico. Este operativo tiene como objetivo brindar apoyo logístico y suministros a las fuerzas de seguridad que enfrentan la creciente violencia y crímenes relacionados con el narcotráfico en la región.
El acto oficial tuvo lugar frente al Monumento a la Bandera, a orillas del río Paraná, con la presencia del gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro. Se estima que en Rosario se desplegarán alrededor de 120 efectivos militares, así como un conjunto de vehículos y equipos, incluyendo helicópteros, lanchas rápidas, camionetas y otros recursos logísticos.
El despliegue de las Fuerzas Armadas responde a las restricciones establecidas por la Ley de Seguridad Interior y de Defensa Nacional, por lo que la mayoría de los recursos serán puestos a disposición de las fuerzas de seguridad federales y provinciales que operan en la zona. Específicamente, se espera que alrededor de 1.000 uniformados federales se sumen a este esfuerzo.
El gesto político del despliegue militar también busca enviar un mensaje claro sobre el compromiso del gobierno en la lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, se ha aclarado que los uniformados no participarán directamente en los operativos en tierra, limitándose su actuación al apoyo logístico y al manejo de los equipos asignados. El ministro Petri, acompañado por los principales jefes militares del país, supervisará personalmente el desarrollo del operativo en Rosario.
En la mañana del martes, Rosario apareció con nuevos carteles intimidatorios dirigidos al gobernador Maximiliano Pullaro y al intendente de la ciudad, Pablo Javkin. Los mensajes, escritos a mano y colocados en lugares públicos como la peatonal Córdoba y las calles Corrientes y Entre Ríos, llevaban consigo frases amenazantes como “con la mafia no se jode o llueve plomo” y “narcoprogresistas”.
Estas amenazas surgieron poco después de la visita del ministro de Defensa de la Nación, Luis Petri, y tras la creación de un comité de crisis con autoridades nacionales para abordar la ola de violencia que ha azotado en las últimas semanas.
Según testigos, se observó a dos individuos colocando los carteles, pero hasta el momento no han sido identificados. Las autoridades locales han iniciado una investigación para determinar la procedencia de estos mensajes intimidatorios y dar con los responsables.
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