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Brutal confesión del femicida de Yanina Pérez en San Juan: "Le di como cinco puñaladas"
Yanina Pérez fue víctima de un brutal asesinato a manos de su expareja, Omar Ariel “El Guascazo” Pérez, el jueves 15 de febrero en el cementerio municipal de Angaco, San Juan, donde ella trabajaba. El agresor, identificado por sus compañeros de trabajo, se encuentra prófugo desde el día del crimen.
Recientemente, se han dado a conocer audios atribuidos al presunto asesino, en los que él mismo se atribuye el crimen de forma escalofriante. En uno de los mensajes de voz, enviado a un conocido, Pérez afirma: “Le di como cinco puñaladas”, según informó el Diario Cuyo en las últimas horas.
Se ha informado que Pérez también envió mensajes a otro conocido, preguntando sobre los rumores en el pueblo acerca de su persona. La respuesta que recibió fue sobre las sospechas de haber matado a una mujer, a lo que Pérez respondió confirmando el crimen en un audio espeluznante: “Me tenía cansado con sus amenazas, la mugrienta esa. Le di como cinco puñaladas”.
A pesar de la evidencia proporcionada por estos audios, las autoridades policiales aún no han logrado capturar al sospechoso. Continúan realizando allanamientos en los campos de Albardón y San Martín, áreas donde se presume que Pérez podría estar oculto según testimonios de testigos.
Fue al cementerio, la mató y escapó
El terrible femicidio de Yanina ocurrió el pasado jueves alrededor de las 10 de la mañana, mientras llevaba a cabo sus labores habituales de limpieza en el cementerio municipal de Angaco.
Según informó el fiscal Adrián Riveros, encargado del caso, Pérez habría ingresado al cementerio en bicicleta. Tras cometer el atroz crimen de cinco puñaladas, el agresor se dio a la fuga a pie y desde entonces no se ha sabido nada más de su paradero.
"Aunque el hombre no tenía funciones asignadas en el cementerio, existe la versión de que era empleado municipal. Hasta el momento, no se ha descartado ninguna hipótesis sobre el ataque", concluyó el fiscal.
Según el informe de la autopsia realizada por el cuerpo forense de San Juan, la víctima presentaba cinco heridas punzocortantes: una en el pecho derecho, otra en el hemitórax derecho, una tercera en la zona abdominal, una cuarta en el pecho izquierdo y la quinta en las costillas izquierdas.
Además, se observaron lesiones cortantes en la mejilla y en la mano izquierda de la víctima, indicativas de posibles movimientos defensivos durante el ataque.
