El Tribunal de Impugnación Penal (TIP) de Santa Rosa confirmó las dos penas a prisión perpetua para las dos condenadas, Magdalena Espósito Valenti y Abigail Páez, por el homicidio del niño Lucio Abel Dupuy. El fallo adoptado por la Sala A de dicho tribunal, también sumó a la primera y madre de la víctima el delito de abuso sexual "gravemente ultrajante", lo que suma 5 años a la pena.
Ambas imutadas fueron condenadas a la máxima pena el 17 de febrero de 2023. La Sala A está conformada por los jueces María Eugenia Schijvarger y Mauricio Piombi, acompañados por la secretaria María Elena Grégoire, quien aceptó todos los planteos de la fiscalía, admitió parcialmente los de la querella y rechazó todos los cuestionamientos realizados por las defensas de las imputadas.
Lucio tenía 5 años cuando murió en Santa Rosa, La Pampa. Su homicidio fue la culminación de años de maltrato infantil.
El 26 de noviembre de 2021, Abigail Páez se dirigió al hospital con Lucio ya sin signos vitales. En el hospital se pudo constatar que había recibido múltiples golpes.
Según se pudo comprobar en la autopsia, fue asesinado horas antes en la calle Allan Kardec al 2300, de la ciudad de Santa Rosa. Esta mujer y la madre de Lucio Dupuy, Magdalena Abigail Espósito, argumentaron que unos ladrones habían ingresado a la casa y golpearon al niño, pero esto fue contradicho por la autopsia y el informe policial.
Según argumentó la abogada de Abigail Páez, Silvina Blanco Gómez, la imputada admitió que golpeó al niño, "pero que no tuvo intencionalidad". Por otro lado, explicó las diferentes acciones realizadas por Páez para "intentar revertir" el hecho, como practicarle RCP, trasladarlo a la posta sanitaria del barrio Atuel y luego al Hospital Evita. Mientras que le pidió la absolución por el beneficio de la duda en cuanto al "abuso sexual".
Por su parte, el abogado de Magdalena Abigail Espósito, la madre de Lucio Dupuy, había solicitado la absolución por los delitos que se la acusaba. Su argumento se basaba en que "en el lugar de los hechos hubo una persona y no dos". "La única testigo fue Abigail", remarcó. Magdalena Espósito sostuvo en el juicio que cuando se despidió de su hijo, "él estaba con vida".
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