Jean Maggi: superó la polio, escaló el Himalaya y podría ser la primera persona con discapacidad en ir al espacio

Todo esto a pesar de haber sufrido una parálisis en ambas piernas tras ser vacunado contra la poliomielitis al poco tiempo de nacer y tener la mala suerte de ser el caso uno de cada dos millones que contrajo la enfermedad en lugar de generar inmunidad.

En una entrevista con el medio argentino Infobae, Maggi cuenta su experiencia en el NASTAR Center de Estados Unidos, el único centro aprobado por la Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés) para capacitar a personas para vuelos espaciales comerciales.

El cielo es el límite

El curso que realizó en este centro -que solo 400 en todo el mundo lo han terminado- podría significarle convertirse en algún momento en la primera persona con una discapacidad en llegar al espacio.

Durante el entrenamiento, Maggi tuvo que realizar una serie de pruebas para constatar que su cuerpo tolerara las fuerzas G. " Para poder hacer un vuelo orbital es necesario que tu cuerpo soporte la fuerza GX que es la que viene de frente y GZ que es la que viene de arriba", explica.

A través de su fundación, Jean Maggi Foundation, obtuvo además una invitación para recorrer las instalaciones de SpaceX, la compañía espacial de Elon Musk, alguien a quien admira por "pensar distinto".

El astronauta civil (que significa ser una persona apta para realizar el vuelo al espacio) cuenta que su sueño de viajar al espacio se remonta a su niñez cuando con 7 años vio a Neil Amstrong descender en la Luna. Desde ese momento que sueña con ser astronauta, algo que comenzó a sentir con mayor fervor cuando en la última década se comenzó a manejar la posibilidad de llevar civiles al espacio a través de compañías privadas.

"Mandé cientos de correos sin respuesta, hasta que salió el documental en Netflix y allí dos de esas empresas se interesaron para que yo volara con ellos", narra al medio argentino.

El documental, que actualmente está disponible en 175 países y en 45 idiomas, lo "catapultó", aasegura, aunque aprecia sobre todo que haya "sacado a tanta gente de la zona de confort".

Si bien todavía ninguna compañía ha logrado enviar tripulaciones civiles al espacio, en el momento en que suceda "sucederá para mí también", concluye Maggi.