Schiappacasse se puso la camiseta de Peñarol, fue recibido por su abuela carbonera y dijo estar “físicamente muy bien”

El atacante de 22 años llegó procedente de Sassuolo de Italia, su último equipo, y en el Aeropuerto de Carrasco fue recibido por Gabriel Cedrés y Walter Olivera, responsables del área deportiva de los mirasoles.

“Llego muy bien”, dijo el delantero formado en River Plate al retornear al fútbol uruguayo. “Físicamente muy bien, entrenando a un gran nivel. No tuve minutos en los partidos, pero hice un entrenamiento bastante fuerte”, dijo en rueda de prensa.

El atacante dijo estar “muy feliz” y con “emoción” por llegar a Peñarol. “Se me cumplió un sueño. Desde chiquito con mi familia siempre iba a la tribuna, siempre hincha”, comentó.

Consultado sobre cómo es el actual Schiappacasse con respecto al que se fue de River a Europa en 2016, más precisamente a Atlético de Madrid B, dijo que hoy es un jugador “un poco más completo, más trabajador para el equipo”.

“He crecido bastante, físicamente me siento mucho mejor”, agregó el delantero que este jueves tuvo una conversación telefónica con el entrenador carbonero Mauricio Larriera.

“Hablé ayer un rato unos 10 o 15 minutos, me dio palabras de confianza y me dijo que le sirve el juego que hago yo”, reveló.

El delantero deberá realizar la cuarentena obligatoria por haber ingresado al país y luego comenzará a entrenar en Los Aromos.

Sobre su posición, Schiappacasse señaló que en Europa ocupó distintos puestos del ataque. “En estos últimos años he jugado de enganche, por la izquierda que es donde me queda más cómodo, por derecha, y de 9 también”.

“Pero poniéndome la camiseta de Peñarol, juego en cualquier puesto”, agregó, sobre dónde se veía jugando en su nuevo equipo.

En su último paso por Italia el atacante estuvo 45 días encerrado por el coronavirus y antes venía de una lesión, comentó.

Además de la emoción por su llegada a Peñarol, el atacante dijo estar muy contento por volver a reencontrarse con su familia, la que fue a esperarlo al aeropuerto. “No veía a la familia hace como un año y a mi padre como seis meses”, dijo Schiappacasse, quien también tuvo la bienvenida de su abuela. “Es hincha a muerte de Peñarol”, expresó.