El lunes, el abogado Juan Pablo Merlo, quien representaba a la familia de Santillán, compartió con la radio Continental los detalles sobre el trágico descubrimiento del cuerpo de "la Tota". Según Merlo, un amigo de Santillán había intentado contactarlo por teléfono horas antes, pero no obtuvo respuesta. A continuación, se acercó a la casa y escuchó que el teléfono sonaba desde adentro. Juntos con otros allegados, buscaron una copia de la llave y, cuando ingresaron a la propiedad, encontraron al exconductor televisivo sentado en un sillón, “como quemado”.
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“Anoche, estábamos con el fiscal para ver si hubo un desperfecto. Él venía reclamando, según me contaron los familiares, que había un problema, que le había dicho a la propietaria. No sabemos si fue un accidente o qué fue lo que realmente pasó”, dijo Merlo. Además, indicó que encontraron evidencia de una posible descarga eléctrica, ya que el sillón donde se encontraba el presentador de música tropical estaba incendiado. “Me parece que eso fue producto de la descarga eléctrica. Lo raro es que en cualquier propiedad lo primero que pasa cuando hay una descarga es que salta la térmica. Él estaba abajo y en la parte de arriba hay un aire acondicionado que hasta se ve que se hubiera incendiado”, expresó el letrado.
El abogado de la familia de Santillán, Merlo, admitió que no se descarta ninguna hipótesis sobre el posible fallecimiento del presentador de música tropical. “Para nosotros, por lo que intuimos, podría haber sido un problema eléctrico, pero no se descarta nada. El tema de la enfermedad que tenía (bipolaridad, según detalló el abogado) uno nunca sabe. Tenía un acompañante terapéutico de lunes a viernes”, contó.
El fiscal Ventricelli ordenó una serie de pericias, incluyendo el análisis de la escena del crimen por parte de los bomberos y la examinación del teléfono del animador. En este momento, la principal teoría es que La Tota se suicidó. Como resultado, su salud mental se convirtió en un factor crucial en la investigación. Varios allegados declararon en el expediente y describieron a La Tota como una persona "muy depresiva" debido a la falta de ingresos y la condena por violencia de género que recibió en el año pasado. La ex pareja de La Tota, víctima en este caso, también había denunciado anteriormente intentos de suicidio por parte del animador en 2022.
Si la condena por violencia de género era confirmada, La Tota habría enfrentado una sentencia de cinco años y medio de cárcel. No obstante, ésta no era la única acusación judicial que lo había involucrado en los últimos años.
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“Respecto al estado de salud del demandado cabe evaluar la abundante prueba producida, me refiero en primer término a las atenciones médicas que recibió en sendas internaciones según surge de los informes de la clínica de Internaciones Avril, la Clínica Del Parque y la Casa Nuestra Señora del Pilar San Juan de Dios”, afirma el fallo, firmado por los jueces Beatriz Verón, Gabriela Scolarici y Maximiliano Cala.
La pericia psicológica oficial, llevada a cabo por una experta, reveló un perfil de personalidad complejo para La Tota. Según el informe, el animador presentaba “un perfil de personalidad con características hipomaníacas con signos de una orientación paranoide; se trata de un sujeto impulsivo y con limitaciones en el manejo de la energía, con personalidad lábil, con rasgos de inmadurez emocional y dependencia afectiva”. Sin embargo, la perito también destacó algunos puntos positivos en su caracterización. Aunque La Tota presentaba algunos desafíos emocionales, también contaba “con recursos psicológicos para adaptarse al medio y a sus circunstancias, lo que incluye el manejo de la ansiedad y tensión", y también (destaco especialmente) que posee “capacidad para generar vínculos socialmente positivos”.
La perito psicológica concluyó su evaluación sin hallar evidencia de agresividad o peligrosidad en el comportamiento y personalidad de La Tota.
El último adiós a la Tota Santillán
Ayer, la ciudad de Morón se sumió en un sentimiento de duelo cuando amigos y familiares se reunieron para rendir homenaje al recordado conductor y animador, quien durante varias décadas conquistó el corazón del público con su irreprimible energía y su papel protagónico en la cumbia.
La noticia del velorio de la figura afectó a los allegados desde las primeras horas del día. En la Cochería Pache hermanos, en el corazón de Castelar, ubicada en Avenida Eva Perón al 1100, se reunieron sus seres queridos para rendir tributo a la memoria del hombre. A pesar de los momentos difíciles que vivió en los últimos años, su legado será recordado por su generosidad y su capacidad para tocar corazones. La atmósfera fue cargada de tristeza y reconocimiento a una vida bien vivida.
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La llegada de los allegados de Carías a la Cochería Pache hermanos se produjo en un ritmo lento y emocionado. Entre los primeros en arribar, se encontraban figuras cercanas a él, como Ricardo García, pareja de Adriana Aguirre, quien conmovido compartió algunos recuerdos sobre sus momentos compartidos con el fallecido. También estuvieron presentes Alfredo Silva, actor y humorista, que había compartido escenarios con él en numerosas ocasiones, y El Viejo Márquez y Nolberto Al K Lá, dos compañeros inseparables de las giras que La Tota organizaba cada fin de semana. La tristeza y el dolor eran palpables en el rostro de los presentes.
La Cochería Pache hermanos se convirtió en un espacio donde los recuerdos y la nostalgia fluyeron libremente. A medida que el día avanzaba, los abrazos y los susurros se sucedían, llenando el aire de un sentimiento de tristeza y admiración. Las historias de sus momentos más vividos resonaron entre aquellos que lo conocieron de verdad. En cada rincón, las palabras cargadas de melancolía se desgranaban, como cuando un amigo cercano, con la voz temblorosa, recordó: "Siempre fue el alma de la fiesta". En la mano, sostenía una foto de uno de los muchos shows que compartieron juntos. Para muchos, Santillán no era solo un hombre de la televisión o de los eventos multitudinarios, sino alguien que siempre estaba dispuesto a sonreír y a tender una mano amiga.
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En una conversación con LAM, Horacio, hermano de Santillán, comenzó a desentrañar los últimos momentos del fallecido. "Me llama un amigo de él que se llama Solé. Él va a la casa, se ve que no contesta, no contesta llamadas ni nada por el estilo. Y entonces ahí empieza todo, y bueno, van, abren la casa y se encuentran con mi hermano tirado ahí en el sillón y todo prendiéndose fuego", dijo, su voz cargada de emoción.
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En ese momento, Horacio intentó despejar cualquier duda sobre la naturaleza de la tragedia: "esto fue un accidente. Él siempre estuvo acompañado, pero en este momento no... Estaba solo. Él bajó, seguramente fue así, porque yo conozco hasta como respira porque yo viví mucho tiempo e iba a volver a vivir con mi hermano otra vez. Él toma pastillas para dormir, ¿me entendés? Entonces, una persona que está empastillada, qué sé yo… Vos lo llamás a medio camino de dormir o descansar y lo más lógico es que va a estar así, abombado, y qué sé yo, y se ve que no pudo… Él bajó porque vive en el primer piso y bueno, no ha podido con lo que estaba pasando…". La emoción se apoderó de él y su relato se cortó abruptamente, ahogado por las lágrimas que brotaban de sus ojos.
Para enfatizar su convicción de que el final de su hermano había sido un accidente, Horacio explicó: "Había algunos desperfectos en la casa que fuimos arreglando porque yo viví ahí, y entonces se fueron arreglando y esto ha quedado ahí, qué sé yo... ¡Fue un accidente! Y se prendió fuego. Y él estaba ahí en el sillón, sabés que tiene gomaespuma y bueno, eso... Aparte hace un gas tóxico y un humo tremendo, y él cayó ahí, porque estaba dormido porque estaba empastillado".
Quién fue La Tota Santillán
La memoria de La Tota Santillán, cuyo verdadero nombre era Ricardo Daniel Carías, se remonta a la localidad mendocina de San Martín, donde nació el 1 de agosto de 1967. Comenzó su carrera a temprana edad, presentándose en clubes bailables y eventos, lo que lo llevó a ser rápidamente reconocido en el ambiente musical.
La década de 1990 fue un punto de inflexión en la carrera de La Tota Santillán, quien llegó a la televisión y se consolidó como un conductor de programas musicales. Dirigió ciclos populares como Pasión tropical y Pasión de sábado, presentando a una variedad de artistas del género tropical, incluyendo a figuras destacadas como Rodrigo "El Potro" Bueno y Walter Olmos. Además, también desarrolló habilidades como productor musical y grabó varios discos dentro de ese género.
La Tota también demostró su versatilidad artística al participar en varias obras teatrales, como "Pobres, pero casi honradas" y "Hasta que la risa no se pare". Además, fue parte de las dos primeras ediciones del popular programa "Cantando por un sueño", donde se midieron habilidades musicales y actuación.
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En el año 2023, La Tota Santillán fue condenado a una pena de cinco años y medio de prisión por ejercer violencia de género contra su expareja, Sol Fiasche, y sus dos hijas menores. Aunque fue declarado culpable de los delitos de “amenazas agravadas por el uso de armas, lesiones leves agravadas por haberse cometido en el marco de la pareja y por mediar violencia de género” en perjuicio de su expareja y sus hijas, no fue encarcelado debido a que la sentencia no estaba firmemente establecida.
La condena de La Tota Santillán también incluyó sentencias por varios delitos. Fue encontrado culpable de "amenazas" contra su exsuegro, "hurto" del teléfono celular de su entonces contador y “amenazas coactivas agravadas por compeler a una persona a hacer abandono de su residencia habitual o de trabajo” en perjuicio de una empleada de su expareja.
