Los plazos para los cierres de listas y las presentaciones de candidaturas aparecen como una sombra sobre la unidad que busca sellar el PJ de cara a las elecciones en la provincia de Buenos Aires el próximo 7 de septiembre.
En ese marco, y en una carrera contra el reloj electoral que ya está en marcha, el peronismo deberá probar de cara a la sociedad si la unidad que se vio en las calles luego de la confirmación de la condena de CFK en la acusas vialidad se traslada a las listas para los comicios bonaerenses.
Con FCK fuera de las listas, todas las opciones sobre las candidaturas son posibles. Por lo menos así los entienden en el entorno del Gobernador Axel Kicillof y también en el Frente Renovador de Sergio Massa.
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, se pronunció públicamente a favor del armado de "listas conjuntas" que representen a todos los sectores. Las palabras del Gobernador sirvieron para bajar la tensión interna, pero no resolvieron el fondo de la cuestión.
Desde el entorno de Kicillof, aseguran que en el marco de la unidad el Gobierno provincial y los intendentes deben tener la lapicera para las elecciones locales y que CFK podrá tallar en las elecciones nacionales de octubre.
La propuesta del Gobernador parece haber caído en saco roto. Máximo Kirchner se mueve como candidato y su nombre suena cada vez más fuerte para encabezar la lista de legisladores provinciales por la populosa tercera sección electoral.
Por ahora tanto desde el entorno de la expresidenta como del propio Máximo Kirchner niegan esa búsqueda. Ante las consultas reiteradas, desde le kirchnerismo aseguran: “nadie está pensando en eso”.
En ese marco, la intendenta de Quilmes y dirigente de La Cámpora, Mayra Mendoza, volvió a criticar al gobernador Axel Kicillof. Mendoza cargó contra Kicillof por impulsar su propio espacio político, el "Movimiento Derecho al Futuro", que cuenta con el respaldo de intendentes y gremialistas. La jefa comunal enfatizó que "hay que respetar la unidad con Cristina Kirchner como conductora”. La jefa municipal evitó nombrar al Gobernador, pero el dardo tenía nombre y apellido.
Mendoza argumentó que la expresidenta impulsó la unidad en 2019 para recuperar el Gobierno y en 2023 para ganar la provincia de Buenos Aires, y que esta unidad "hizo a muchos intendentes, legisladores, a Kicillof gobernador", por lo que "eso es lo que hay que seguir respetando". En un claro mensaje a Kicillof, Mendoza afirmó que "quienes quieran, o manifiesten, o no digan pero vayan construyendo otra cosa tendrían que decirlo, porque está en juego el resultado electoral de Provincia".
El esquema que se imagina Axel Kicillof en su provincia, se espeja en el resto de los territorios gobernados por el peronismo. Más allá del apoyo a CFK tras su condena, los mandatarios apuestan a quedarse con los biromes para las elecciones locales.
Los gobernadores exigieron al consejo partidario "más realismo en las estrategias nacionales del Partido Justicialista", pidiendo que se respete la situación de quienes administran una provincia y tienen otro rol en la estrategia opositora. También reclamaron que dejen de expulsar dirigentes solo porque piensan diferente y pidieron el "fin de las intervenciones partidarias" que Cristina impulsó cuando presidía el PJ.
Por su parte, desde el Frente Renovador de Sergio Massa, comprenden que la condena contra CFK "despertó" al PJ y se muestran como impulsores de la "unidad" de cara a las elecciones de medio término. Consideran que la condena "funcionó como catalizador" y la interpretaron como un intento de proscribir al peronismo, lo que aceleró los tiempos. En ese marco, insisten en la "construcción de una propuesta unificada". Sergio Massa aspira a quedarse con "un tercio de los lugares si hay acuerdo de unidad", con el objetivo de colocar diputados y senadores provinciales.
Más allá de la predisposición al acuerdo, el Frente Renovador también mostró sus dientes. Por eso, dejó trascender que si no hay acuerdo no tendría problema en “ir con su propia lista”.