El FBI envió una comunicación oficial al gobierno argentino, que encabeza el presidente Alberto Fernández, en la que da cuenta de que el piloto del avión venezolano-iraní retenido en Ezeiza, Gholamreza Ghasemi, tiene vinculación con una organización terrorista.
El juez federal de Lomas de Zamora Federico Villena, quien lleva la causa, recibió el informe del FBI sobre los antecedentes y las vinculaciones que se le asignan al piloto y en las próximas horas devolverá los teléfonos celulares confiscados a los tripulantes venezolanos.
En el informe, al que accedió El Observador, el organismo estadounidense sostiene que Ghasemi está relacionado a las Fuerzas Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Iraní (IRGC-QF) y al grupo Hezbolá. "Gholamreza Ghasemi es CEO y miembro del directorio de Oeshm Fars Air, una empresa señalada por el Tesoro de los Estados Unidos en 2019 debido a su participación directa en la actividad terrorista y la asistencia que brinda a las Fuerzas Quds y la aerolínea iraní Mahan Air, que han sido designadas como entidades terroristas”, sentencia el informe. "Además de su puesto de directivo, Ghasemi también es piloto", detalla.
El FBI también dice que la aerolínea Oeshm Fars Air -que el piloto integra- opera vuelos de carga "bajo cobertura civil" para las Fuerzas Quds y la Guardia Revolucionaria de Irán, con el fin, por ejemplo, de "contrabandear armas y equipos sensibles de Irán a Siria", entre otras cosas "Esta actividad es parte de los esfuerzos de Irán para establecer una presencia militar en todo el mundo".
"Oeshm Fars Air opera vuelos regulares entre Irán y Siria. Como parte de los esfuerzos realizados por Irán y la Fuerza Quds para equipar a Hezbolá con armas, se están pasando de contrabando componentes militares avanzados y armas desde Irán a Hezbolá en el Líbano utilizando vuelos civiles desde Teherán a Damasco", indica.
E insiste: "Las Fuerza Quds operan campos de entrenamiento para Hezbolá en el valle de Bekaa en el Líbano y, según se informa, ha entrenado a más de 3.000 combatientes de Hezbolá en las instalaciones de entrenamiento de la Guardia Revolucionaria en Irán. Las Fuerzas Quds proporcionan aproximadamente US$ 100 a US$ 200 millones en fondos al año para Hezbolá y lo han ayudado a rearmarse en violación de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU".
En tanto, una de las próximas medidas procesales del juez Villena será devolver los teléfonos celulares que habían sido confiscados a los 14 tripulantes venezolanos que aún se encuentran en el país vecino con la prohibición de salir. "En las próximas horas se devolverían los celulares, y el juzgado y la fiscalía trabajan en afinar de alguna forma el análisis de la información para hacer su presentación", indicaron a esta agencia fuentes judiciales.
Fue un pedido que le hicieron al juez Villena y al cual la fiscal Cecilia Incardona no se opuso, en tanto ya estuviera completa la extracción de la información.
El avión de la empresa Emtrasur, que tiene matrícula venezolana, llegó al aeropuerto de Ezeiza el lunes de la semana pasada y se encuentra bajo custodia judicial.
La aeronave, procedente de Caracas, llegó a Buenos Aires después de haber hecho una parada previa en el aeropuerto de Córdoba porque ese día la niebla que había en el aeropuerto internacional de Ezeiza dificultaba las condiciones para el aterrizaje.
El avión llegó a Argentina con el motivo formal de traer autopartes, información que fue constatada por las agencias encargadas de ejercer los controles respectivos.
La tripulación del vuelo de Emtrasur tenía previsto continuar su viaje el martes de la semana pasada, pero eso no fue posible porque las empresas con capacidad para venderle combustible se negaron a hacerlo producto de las sanciones del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos sobre la aeronave.
Con información de El Cronista.