En el quinto día del juicio que investiga la muerte de cinco bebés y el presunto intento de asesinato de otros ocho en el Hospital Materno Neonatal de Córdoba, los padres de Angeline Giselle Cornelio Rojas se hicieron oír, demandando que la enfermera Brenda Agüero, principal acusada de los ataques, estuviera presente mientras expresaban su testimonio. En su comparecencia ante el tribunal y el jurado popular, no dudaron en señalar directamente a Agüero como culpable de la trágica pérdida de su hija.
El 6 de junio de 2022, a las 10:44, Yoselín Rojas se convirtió en madre. Su bebé, Angeline, llegó al mundo en perfectas condiciones: nació “sana, a término, en peso adecuado a la edad gestacional, sin signos de sufrimiento fetal, sin malformaciones, con ausencia de lesiones”, como lo documentó la presentación judicial.
Sin variaciones significativas, la testimonio de la madre de la bebé fallecida se ajustó a su declaración inicial. Ella recordó con claridad que había observado a la enfermera Brenda Agüero que “los miraba raro desde que llegó a la sala de recuperación”, no solo a ella, sino también a su pareja, Jaime Cornelio Pérez.
"Era una mirada fría, muy rara. Cuando le da el bebé a mi pareja, nos miraba muy raro. No sé si con lástima o cómo. Nos miraba de reojo. Es la persona que se llevó el bebé", contó y recordó que “sin ninguna explicación” se llevó a la pequeña de los brazos del padre. “Se la lleva y a los cinco minutos regresa, pero sin mi hija”, dijo.
De acuerdo con su relato, el cual fue posteriormente corroborado por el padre de la bebé, 15 minutos más tarde les informaron que Angeline había tenido un paro cardiorrespiratorio. Además, mencionaron que los médicos consideraron "inexplicable" la situación que había sufrido la recién nacida. La hora del fallecimiento quedó registrada a las 16:30 de ese mismo día.
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"A nosotros nos hicieron creer que nada pasaba, cuando estaban pasando tantas cosas. Es un dolor grande. Vivimos ahora con ese dolor de por vida”, manifestó. También comentaron que al día siguiente regresaron al Neonatal en busca de respuestas y para averiguar la identidad de la enfermera que había llevado a su hija, pero en el hospital “la ocultaron” y se negaron a proporcionar su nombre.
"Vi una foto de una enfermera. Quería saber quién era la persona de la que hablaban. Cuando la vi en la foto, vi que fue ella quien se llevó a mi bebé", relató acerca de cómo supo que fue la sospechosa.
“Es muy difícil para nosotros lidiar con todo esto, solo pido que se haga Justicia por mi bebé inocente. No merecía morir de esta manera, que fuera asesinada. Nos mintieron, en medio de este dolor, con que no sabían lo que había pasado. Destrozados nos fuimos a casa”, expresó Yoselín, quien se mostró visiblemente afectada y no pudo evitar llorar en varios momentos de su testimonio.
En el juicio por jurados, la madre de Angeline, la primera bebé que murió en el hospital Neonatal de Córdoba, contó que la causa de fallecimiento fue una bradicardia extrema y apnea causadas por niveles excesivos de potasio.
El fallecimiento de Angeline fue el primer caso en ser llevado ante la Justicia en Córdoba, dado que sus padres se percataron de que el acta de defunción no contaba con la firma de la médica de guardia. Luego de que se llevara a cabo la autopsia, la madre, visiblemente conmovida, declaró: "Mi bebé fue envenenada con potasio. Le habían puesto una alta dosis de potasio".
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Al abandonar la sala de audiencias, la madre conversó con los medios de comunicación que se encontraban en el lugar y habló sobre las 13 víctimas que se intentan esclarecer en el juicio. “Yo sólo pido justicia. Por la muerte de mi bebé que se haga justicia. Hoy conté mi verdad por todos los bebés asesinados. Los mataron de forma cruel, bebés inocentes, no merecían morir”, añadió, antes de fundirse en un emotivo abrazo con Damaris Bustamante, madre de Benjamín, el segundo de los cinco fallecidos.
Después de la intervención de Yoselín, se hizo una pausa, y más tarde tomaron la palabra el padre de Angeline, Jaime Cornelio Pérez, y su tía, Sara Rojas. Los tres relataron la secuencia de los acontecimientos de manera similar.
Según los hallazgos del fiscal Raúl Garzón, que en el juicio son respaldados por sus colegas Sergio Ruiz Moreno y Mercedes Ballestrini, se alega que la enfermera habría explotado “un momento en que nadie observaba su obrar, ocultando materialmente su acto, para suministrarle -de un modo no precisado por la instrucción-, dosis de potasio no compatibles con la vida, a sabiendas, por sus conocimientos profesionales, que la administración de dicha sustancia causaría la muerte de la recién nacida”.
En su caso, Angeline fue una de las dos recién nacidas cuya muerte estuvo vinculada a la práctica de la autocirugía conocida como la "autopista". Los hallazgos del estudio mostraron que el fallecimiento de la bebé se debió a una sobresaturación de potasio en la sangre, conocida como hiperpotasemia. Además, se descubrió que Angeline había sufrido de un “infiltrado hemático intramuscular” en el muslo derecho, un tipo de lesión que se asocia con los “pinchazos inexplicables” que afectaron a varios neonatos.
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En aquel doloroso 6 de junio, también perdió la vida Melody Luz Molina, mientras que otros dos recién nacidos que lograron sobrevivir sufrieron una descompensación.
El abogado querellante Carlos Nayi, que representa a varias familias afectadas, solicitó incluir en la lista de testigos a Leandro David Luna, el padre de Benjamín Luna, y a su tía materna, Laura Bustamante. Esta petición se basa en el testimonio de la madre del bebé, Damaris Bustamante, quien relató que se reunió con estas dos personas, dos días tras la muerte de su hijo, junto con la ex directora de la institución, Liliana Asís, y el ex subdirector de Gestión Administrativa del hospital, Julio Escudero Salama.
Los abogados defensores respondieron a la solicitud, sosteniendo que la parte querellante ya estaba al tanto de la reunión mencionada y, por lo tanto, debieron haber citado a los testigos con anterioridad. Sin embargo, el tribunal rechazó esta objeción y accedió a la petición de Nayi.
Con esta decisión, se prevé la participación de Leandro David Luna y Laura Bustamante como testigos en la audiencia programada para el martes.
A continuación, si el horario lo permite, ofrecerán su testimonio Vanessa Cáceres Bruno y Raúl Calderón, quienes son los padres de Francisco Calderón Cáceres, el primer bebé que falleció "inexplicablemente" en el Neonatal de Córdoba. Su deceso ocurrió el 18 de marzo de 2022, un evento que da inicio a la trágica serie de hechos que se están examinando en este juicio de gran relevancia.