Leon XIV inicia su pontificado con una misa en el Vaticano: "Es la hora del amor"
El pontificado de Prevost, elegido el pasado 8 de mayo tras la muerte de Francisco, se considera oficialmente inaugurado luego de recibir el palio y el anillo del Pescador, símbolos del poder pontificio
18 de mayo 2025 - 7:09hs
León XIV recibió este domingo, emocionado, el palio y el Anillo del Pescador, símbolos del poder pontificio, durante la misa de inicio de magisterio en la plaza de San Pedro del Vaticano ante numerosas autoridades y miles de fieles.
Acto seguido el nuevo pontífice se miró por unos instantes la mano, casi conteniendo las lágrimas, mientras la plaza rompió en un sonoro aplauso.
El pontificado de Prevost
El pontificado de Prevost, elegido el pasado 8 de mayo en el cónclave tras la muerte de Francisco, se considera oficialmente inaugurado con la entrega de estos dos símbolos.
León XIV recibió en primer lugar el palio, una estola de lana blanca que representa el peso del 'rebaño' sobre los hombros del pastor, decorada con seis cruces negras de seda y enganchado con tres agujas que representan los clavos de la Cruz.
Tras una oración, el cardenal filipino le entregó el Anillo del Pescador, de oro y que presenta en su sello una representación de San Pedro con las llaves y la red de pescador. En su interior, la inscripción 'Leo XIV' (en latín) y su escudo pontificio.
La jornada empezó con el papa saludando por primera vez a los fieles desde el papamóvil y, después, acudió a rezar al lugar donde según la tradición fue sepultado el Apóstol Pedro, bajo el gran baldaquino en el centro de la basílica vaticana.
Fue un momento de gran simbolismo porque en ese mismo lugar en el que el nuevo papa oraba, con paramentos blancos y acompañado por los patriarcas de las iglesias orientales, también fueron dispuestos tanto el palio como el anillo que le acompañarán en su ministerio.
Después, el palio y el anillo fueron sacados a la plaza desde el interior de la basílica, llevados en procesión por tres diáconos junto a los Evangelios.
El rito de la imposición de estos símbolos empezó con una invocación: "Que el Espíritu de la Verdad, que procede del Padre, donde abundante inspiración y discernimiento a tu magisterio para confirmar a los hermanos en la unidad de la fe".
Entre los oficiantes de la misa estuvo revelada la universalidad de la iglesia, con un cardenal diácono europeo, el italiano Dominique Mamberti, un presbítero africano, Fridolin Ambongo Besungu, y el asiático Tagle.
La misa de inicio de pontificado de León XIV congregó a representantes de unos 150 países y organizaciones internacionales, como los reyes de España, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, la presidenta de Perú, Dina Boluarte, y el vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance.
"Es la hora del amor"
El Papa León XIV ha pedido una Iglesia "unida" que se convierta en "fermento para un mundo reconciliado"; una Iglesia "misionera" que "abre los brazos al mundo", frente a la discordia, la violencia, los prejuicios y el miedo a lo diferente, y ha exclamado que es "la hora del amor".
"Hermanos y hermanas, quisiera que este fuera nuestro primer gran deseo: una Iglesia unida, signo de unidad y comunión, que se convierta en fermento para un mundo reconciliado. En nuestro tiempo, vemos aún demasiada discordia, demasiadas heridas causadas por el odio, la violencia, los prejuicios, el miedo a lo diferente,
por un paradigma económico que explota los recursos de la tierra y margina a los más pobres. Y nosotros queremos ser, dentro de esta masa, una pequeña levadura de unidad, de comunión y de fraternidad", ha subrayado León XIV.
Asimismo, ha invitado a guiarse por el espíritu misionero "sin encerrarse" en el pequeño grupo y sin sentirse "superiores al mundo", trabajando por una "unidad que no anula las diferencias, sino que valora la historia personal de cada uno y la cultura social y religiosa de cada pueblo".
También ha subrayado la necesidad de "una Iglesia misionera, que abre los brazos al mundo, que anuncia la Palabra, que se deja cuestionar por la historia, y que se convierte en fermento de concordia para la humanidad".