La petrolera estatal mexicana Pemex reportó una pérdida de más de 2.100 millones de dólares en el primer trimestre del año, golpeada por menores ventas, incremento en gastos, costo y caída del peso. Pero la empresa arrastra otro problema menos visible: una deuda estructural propia y con sus proveedores que se agranda como una bola de nieve.
-La petrolera estatal mexicana Pemex reportó una pérdida neta de 43.327 millones de pesos (2.118 millones de dólares) en el primer trimestre del año, golpeada por menores ventas, incremento en gastos, costo financiero y deterioro del peso.
-El débil desempeño de Pemex, una de las mayores empresas de México, se compara con ganancia de 4,696 millones de pesos registrada durante el primer trimestre del año pasado.
-Los ingresos totales de la compañía disminuyeron en el primer trimestre un 2.5% interanual, debido a menor volumen comercializado de crudo, dijo la empresa. La producción de crudo fue de 1.615 millón de barriles por día (bpd), una baja del 11.3% frente al mismo trimestre del año pasado, debido a la declinación natural de campos maduros, así como un retraso en terminación de pozos complejos y menores rendimientos.
-En paralelo, Pemex enfrenta una deuda de aproximadamente 100 mil millones de dólares, y además, la deuda con sus proveedores ha alcanzado los 25 mil millones de dólares a finales de 2024, un aumento significativo desde los 7,6 mil millones en 2018.
-Según reveló el Financial Times, la deuda con los proveedores representa más del 10% de los pasivos totales de Pemex, y ha afectado la economía local en ciudades como Ciudad del Carmen y Coatzacoalcos, con despidos y cierre de empresas.
- El gobierno de Claudia Sheinbaum ha implementado un plan para pagar a los proveedores, y en marzo se pagaron 147 mil millones de pesos (7,5 mil millones de dólares).
- Pemex continúa enfrentando graves pérdidas financieras, reportando 9.700 millones de dólares en pérdidas en los últimos tres meses de 2024, y su producción se encuentra en niveles cercanos a los más bajos de las últimas décadas.
- Aunque Sheinbaum ha mencionado fortalecer a Pemex, no hay claridad sobre cómo se resolverán sus problemas estructurales y financieros, y la falta de inversiones privadas sigue siendo un obstáculo.
1. ¿Cómo ha llegado Pemex a esta situación financiera tan crítica?
Pemex ha sufrido un grave deterioro financiero durante la última década, con una deuda global que ha alcanzado los 100 mil millones de dólares. La empresa se ha visto atrapada en un círculo vicioso, donde su incapacidad para generar ingresos suficientes ha obligado al gobierno mexicano a inyectar recursos y a posponer pagos a proveedores. Durante los gobiernos anteriores, especialmente bajo la administración de Andrés Manuel López Obrador, Pemex ha sido el centro de políticas que priorizan la soberanía energética, pero estas no han sido suficientes para estabilizar sus finanzas.
2. ¿Qué impacto tiene la deuda con los proveedores en la operación de Pemex?
La deuda con los proveedores ha escalado a 25 mil millones de dólares a finales de 2024, lo que representa un porcentaje importante de los pasivos totales de Pemex. Esto ha provocado efectos en las economías locales, especialmente en el Golfo de México, donde ciudades como Ciudad del Carmen y Coatzacoalcos dependen en gran medida de la actividad de la petrolera. La falta de pago a los proveedores ha derivado en despidos y cierres de pequeñas empresas, lo que afecta tanto a la operatividad de Pemex como a la economía regional.
3. ¿Qué medidas está tomando el gobierno para solucionar esta crisis?
El gobierno de Claudia Sheinbaum ha implementado un plan para saldar la deuda con los proveedores, logrando en marzo el pago de 147 mil millones de pesos (7,5 mil millones de dólares). Sin embargo, este esfuerzo no ha estado exento de retrasos, y aún persisten dudas sobre la efectividad del plan. A pesar de las iniciativas, la falta de una estrategia clara y el nombramiento de un académico sin experiencia ejecutiva al frente de Pemex generan incertidumbre sobre la viabilidad de las soluciones propuestas.
4. ¿Qué alternativas existen para resolver los problemas financieros de Pemex?
Los expertos coinciden, según publicó el Financial Times, en que una solución a largo plazo requiere más que una reestructuración financiera. La clave para superar la crisis de Pemex podría ser una mayor apertura a inversiones privadas, lo que permitiría aumentar la producción y reducir la dependencia del gasto público. Sin embargo, hasta ahora, las políticas del gobierno no han logrado atraer suficientes inversiones externas, y la situación financiera sigue siendo crítica. En julio, se espera que el gobierno comience a anunciar algunas inversiones mixtas, lo que podría ser un paso clave para estabilizar la situación.
A pesar de los esfuerzos del gobierno de Claudia Sheinbaum para enfrentar la crisis de deuda de Pemex, la empresa continúa en una situación financiera y operativa complicada. Si bien se han implementado pagos para reducir la deuda con los proveedores, la falta de claridad sobre cómo resolver los problemas estructurales y financieros de Pemex genera incertidumbre sobre su futuro. Los analistas esperan que, a medida que se acerque julio, se tomen decisiones clave en cuanto a inversiones mixtas y otros mecanismos financieros que podrían ayudar a la empresa a recuperar su estabilidad. Sin embargo, hasta que no haya un cambio significativo en la estrategia de inversión y una mejor gestión de los recursos, Pemex continuará enfrentando retos importantes para revertir su situación.