Barcelona es conocida por su lujo, su arquitectura y edificios históricos y famosos a lo largo del mundo, su entretenida vida nocturna y su impresionante escenario junto al mar. Sin embargo, lo que muchos visitantes no saben, y hasta habitantes catalanes, es que a pocos kilómetros de esta metrópolis, se esconde un mundo completamente diferente de serenidad y maravillas naturales.
Barcelona no solo es un destino para aquellos que buscan la sofisticación urbana, sino también para los amantes de la naturaleza y las experiencias al aire libre. Existen infinitas joyas y pueblos escondidos que se encuentran cerca de la ciudad condal. Solo debes decidir coger tu coche y recorrer sus carreteras para conocer sitios encantadores que tienes la obligación de visitar una vez en tu vida, para descubrir que existen destinos fuera de las grandes capitales del mundo.
En este artículo, te invitamos a explorar esta maravilla natural y sumergirte en la magia que ofrece toda la zona del Volcán de Santa Margarida, un destino al aire libre perfecto para aquellos que buscan un respiro de la vida urbana de Barcelona.
A poco más de 100 kilómetros de distancia desde el centro de la capital catalana, emerge el imponente Volcán de Santa Margarida, ubicado en la región volcánica de La Garrotxa, en la provincia de Girona. Este antiguo cráter, que se mantuvo inactivo durante más de 11.000 años, se alza majestuoso a unos 750 metros de altitud y cuenta con un diámetro de aproximadamente dos kilómetros. Todos sus alrededores te enamorarán y más aún en otoño, cuando los colores de la estación encanten el lugar.
En su centro yace una pequeña iglesia románica en ruinas que añade un toque místico a este paisaje volcánico. La ermita en honor a Santa Margarida la Cot es el corazón de este lugar, rodeado de vegetación y arbustos que han conquistado lo que alguna vez fue terreno arrasado por la lava. En su interior, se encuentra una réplica de una antigua imagen del siglo VI que aún se venera en el Museo Diocesano de Girona.
Esta es una escapada ideal que podrás hacer por el día, ya que este es solo un punto geográfico al cual podrás ir tanto en vehículo como en bicicleta. Pero si lo que deseas es convertir este viaje en uno de fin de semana, también podrás preparar tus maletas y dirigirte a la localidad de Besalú, que se encuentra a 30 minutos exactos en coche.
Aquí encontrarás un pueblo de ensueño estilo medieval y toda su edificación como su puente famoso son de piedra. Uno de sus puntos centrales es encantador, y estamos hablando de la plaza del Prat de Sant Pere. El puente que mencionamos anteriormente, inspiró grandes obras literarias como "El puente de los judíos", del escritor Martí Gironell. Esta escapada representará solo un viaje de 130 kilómetros desde Barcelona, una hora y media de viaje en coche aproximadamente por la AP-7. Esta misma carretera te llevará tanto a las cercanías de la Reserva Volcánica de La Garrotxa como a Besalú.
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