Iceberg mayor al tamaño de Flores se desprendió del continente antártico

El glaciar, que mide 5.800 kilómetros cuadrados (más grande que todo el departamento de Flores) y pesa un billón de toneladas, tendrá por nombre "A68". Su tamaño es tal, dijeron los científicos, que los mapas que representan el continente blanco deberán ser redibujados. El glaciar A68 se desprendió de la plataforma de hielo Larsen-C, y redujo su tamaño en un 12%.

Adrian Luckman, uno de los investigadores del Proyecto Midas, explicó que lo preocupante es que el desprendimiento pueda desestabilizar el resto de la plataforma, que está entre las más extensas del continente blanco, a pesar de que continuará regenerándose naturalmente.

Los investigadores coinciden en que este desprendimiento no fue causado por el cambio climático, ni ocasionará el aumento de los niveles del mar. Esto último se debe a que la masa de hielo ya se encontraba flotando en el agua, por lo cual su desprendimiento y posterior derretimiento no generarán ningún cambio.

Lo que sí se espera es que la masa de hielo no se mantenga en una pieza, sino que se rompa en varios fragmentos más chicos, algunos de los cuales permanecerán en el área por décadas, mientras que otros flotarán hacia mares más al norte, donde las aguas son más cálidas. Esto no tendría efectos inmediatos en la navegación, ya que tomará un tiempo antes de que los fragmentos lleguen a zonas con tránsito naval.

Si bien los efectos del desprendimiento del glaciar no son inmediatos, hay quienes interpretan este fenómeno como una llamada de alerta de último minuto.

El explorador polar Robert Swan, por ejemplo, habló acerca de la formación de la grieta en un foro sobre medioambiente realizado en el instituto Sun Valley. Durante su ponencia, el experto dijo: "El Larsen-C es la bandera de alerta de la Madre Naturaleza. Es su forma de decir: 'Hey, presten atención a lo que le están haciendo al planeta en el que todos vivimos'".