Leonardo Carreño

Iglesia católica espera retomar las misas presenciales en dos semanas

El cardenal Daniel Sturla dijo que está en conversaciones con el gobierno para retomar las ceremonias presenciales

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17 de mayo de 2020 a las 20:02

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El cardenal Daniel Sturla anunció este domingo al visitar el seminario Cristo Rey de la Iglesia Católica, que estaba dialogando con el gobierno para poder habilitar lo más pronto posible las misas con participación de los fieles.

“Confiamos que el próximo fin de semana o el otro podamos celebrar con fieles en las iglesias”, dijo el arzobispo de Montevideo en un video publicado en las redes de la institución.

Sturla agregó que el retorno sería con un protocolo que “estrictamente” ayudará a “mantener y cuidar la salud como un don de Dios” y tener todos los cuidados necesarios.

“Esperemos un poco y recemos, esperamos con paciencia y ardor que podamos participar plenamente de la eucaristía siendo parte de la comunidad creyente que celebra el domingo”, sentenció.

Las misas con público se dejaron de hacer el pasado 15 de marzo, dos días después de que se dieran a conocer los primeros cuatro casos de coronavirus en el país y de que el gobierno decretara la emergencia sanitaria. 

Si bien las iglesias y las parroquias nunca cerraron sus puertas como en otros países, las celebraciones dejaron de ser públicas y masivas. De esta manera, las personas pueden ir a rezar de manera individual, pero las celebraciones multitudinarias pasaron a transmitirse por radio, televisión (como en Semana Santa) u otras plataformas tecnológicas. 

El presidente de la Conferencia Episcopal del Uruguay (CEU), monseñor Arturo Fajardo, explicó la semana pasada a El Observador que el protocolo para retomar las actividades que estaban terminando de redactar, establecerá la participación en las misas de menos personas que lo que permite el aforo máximo (que puede ser de hasta mil personas, según el templo), así como el ingreso con tapabocas, la utilización de alcohol en gel y algunos cambios en las celebraciones.

Para retomar la actividad, también se prevé exhortar a la población de riesgo, sobre todo aquellos mayores de 65 años, a no asistir a las iglesias mientras dure la pandemia.

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