Koné, el jugador que salvó cuatro vidas en la cancha
Nació en Togo, fue víctima de racismo y el lunes recibió el premio de FIFA
Tiempo de lectura: -'
24 de octubre de 2017 a las 11:56
Te quedan {{observador.articlesLeft}} notas gratuitas.
Accedé ilimitado desde US$ 3 45 / mes
"Cuando eres africano, un hombre negro, y juegas en un país como este, no es como jugar en Francia o Bélgica. Aunque las cosas están mejorando, aún hay mucho racismo. Cuando estoy en el campo trato de no prestarle atención. Pero es difícil. El racismo me pone enfermo. Duele. Para nosotros, como jugadores africanos, es frustrante escuchar cosas como 'mono' o 'negro'. Tienes que estar ahí, en el terreno de juego, y que te lo indiquen para que entiendas realmente cómo te hace sentir", relató Koné en The Guardian.
Koné, de 26 años, que juega en el Zbrojovka Brno checo, salvó la vida del golero rival Martin Berkovec el pasado mes de febrero al evitar que se tragara la lengua tras un choque.
El futbolista africano no estuvo presente en la gala, celebrada en Londres, y no recogió el premio -lo recogió un familiar suyo-, entregado por el exjugador Marcel Desailly por el actor británico Patrick Stewart.
En una entrevista que concedió a The Guardian, Koné contó su vida. Nació en Bondoukou, al norte de Costa de Marfil, y se crió a las afueras de Abidjan, la capital económica del país. Se nacionalizó para jugar para Togo por su madre. Pasó su infancia pescando cangrejos y lavando autos para ganar dinero y comprarse sus primeras botas de fútbol. Su ídolo siempre ha sido Didier Drogba, ex delantero del Chelsea, por lo que sueña jugar en Inglaterra. Ha sufrido muchas dificultades en su carrera futbolística y su primera aventura en el extranjero fue en Tailandia. También jugó en Omán, en Portugal y Hungría, hasta que llegó a República Checa. Allí se ha establecido con su familia. Su drama principal es que siempre ha tenido que lidiar con el racismo.
"Fue mi mamá quien me dijo que si algo malo pasaba en la cancha no debía salir corriendo y pensar que alguien más iba a resolver la situación", explica Koné, quien no pudo presenciar la gala de The Best celebrada en Londres. Su premio lo recogió un familiar suyo de manos del ex jugador francés Marcel Desailly y del actor británico Patrick Stewart.
Esta nota es exclusiva para suscriptores.
Accedé ahora y sin límites a toda la información.
¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí
Alcanzaste el límite de notas gratuitas.
Accedé ahora y sin límites a toda la información.
Registrate gratis y seguí navegando.
¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.
Para comentar debe iniciar sesión.