Las apariencias engañan

En la mesa y en el juego se conoce al caballero y a la dama también

Tiempo de lectura: -'

06 de septiembre de 2019 a las 05:00

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 3 45 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 3 45 / mes

En nuestro encuentro de la semana pasada, hice mención a la servilleta y a su uso. Hoy deseo hablar un poco sobre los cubiertos en la mesa y su empleo. Sé bien que aunque los tiempos han cambiado el gusto por la delicadeza no pasa. No intentaré dar un código porque en las comidas debemos estar más relajados y sin tensiones.

Desde niños aprendimos los nombres de los cubiertos que habitualmente se emplean para comer. Es verdad que, en alguna oportunidad nos encontraremos con una mesa y un despliegue de cubiertos. Quizás no estaremos acostumbrados a su empleo pero también es preciso hacer un comentario. Jamás se puede dejar en ridículo a un comensal poniéndolo en situaciones molestas.  

Por otra parte y en estos tiempos son frecuentes los llamados almuerzos de trabajo. De intento menciono el sustantivo “almuerzo” y no “comida”. Este último término lo emplean los españoles y provocan algunas confusiones a los desprevenidos.

En nuestro hogar y habitualmente, “ponemos” la mesa. Me parece que he mencionado ya ese “poner la mesa”. Viene de lejos cuando la mesa no tenía un sitio fijo en una casa. “Se ponía la mesa” en un lugar y se colocaban los utensilios que se acercaban "cubiertos” por un paño. Pero no nos vayamos muy lejos.

Por lo general para un almuerzo o una cena se coloca un tenedor y un cuchillo junto al plato y a lo mejor una cuchara para cada comensal. En algunas ocasiones se pondrán dos tenedores y dos cuchillos. Aprendí en España un dicho lleno de sabiduría. Dicen que “en la mesa y en el juego se conoce al caballero y a la dama también". La sabiduría aflora en esa frase y sin alardes llama a la corrección.

Alguna vez me han preguntado por los motivos que nos llevan a comportarnos de una manera elegante en la mesa y también -no podía faltar- el ejercicio de la libertad. Mi respuesta es fuerte pero la repito: “Lo hacemos así para no dar asco a los demás que comparten mesa con nosotros”.

Lo de lúdico, libre, “a piacere”, lo dejo a un lado porque por respeto y educación debo comportarme en la mesa con elegancia. Me parece que lo he expresado en alguna otra nota. “Las mujeres y los hombres nos alimentamos. En cambio los animales comen”. El respeto y el comportamiento están en la base de todos los modales que vivimos en la vida cotidiana. Es cierto que hay personas que quizás pueden presentarse un poco atildadas. Me parece que es mejor dejar pasar por alto aquellas cosas que a lo mejor nos molestan y rescatemos la buena voluntad, la delicadez en el fondo de algunas actitudes.

Me he ido un poco lejos. Regreso a aquello de “en la mesa y el juego se conoce al caballero y a la dama también”. Utilizar los cubiertos  requiere un aprendizaje. Papá o mamá deben dar el ejemplo y así los niños aprenderán a comportarse. No se puede pretender que una criatura de seis años sea capaz de utilizar el tenedor y la paleta del pescado. Todo a su tiempo.

Hay alimentos que, para ingerirlos, requieren solamente el empleo del tenedor. No olvido la pegadiza melodía de una canción infantil: “no me mates con cuchillo, mátame con tenedor”. Viene a cuento lo sucedido en un almuerzo en un buen restorán. El comensal pidió de postre queso y dulce. Se lo trajeron junto con un tenedor. De inmediato solicitó al mozo un cuchillo, momento terrible que puso de manifiesto que no conocía el sencillo verso que termino de citar. Hay alimentos que no requieren el empleo del cuchillo. Para el pescado podemos emplear el tenedor y la paleta si disponemos de los mismos. En caso contrario usaremos el tenedor y un trocito de pan.

CONTENIDO EXCLUSIVO Member

Esta nota es exclusiva para suscriptores.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Accedé ahora y sin límites a toda la información.

Registrate gratis y seguí navegando.