Lo suspendieron 14 semanas por empujar a un árbitro

Kolelishvili defendía a la salida de un ruck rival, y se puso nervioso luego que el árbitro se quedara parado justo en la línea en la que debía salir a defender el georgiano, que participó en el último Mundial. Sin pensarlo empujó al juez, que de inmediato cobró penal.

Se especulaba con sanciones desde un año hasta de por vida, ya que la agresión al árbitro es considerada una de las situaciones más graves del rugby, aunque su arrepentimiento inmediato y sus disculpas lo ayudaron. De hecho, durante el partido, Barnes apenas lo sancionó con una tarjeta amarilla y un penal en contra.

De todos modos, la sanción causó polémica, ya que en otras situaciones similares no se actuó con tanta dureza