La Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) presentó su informe anual sobre antisemitismo, el cual revela cifras alarmantes: las denuncias por antisemitismo crecieron un 15% en comparación con el año anterior, alcanzando un total de 687 casos. A pesar de ser un aumento preocupante, el informe destaca que Argentina sigue siendo uno de los países más seguros para vivir siendo judío, en comparación con el resto del mundo. Sin embargo, los datos evidencian que el antisemitismo sigue en crecimiento, y lo que es aún más grave, la forma en que se expresa está mutando.
Sabrina Ajmechet, referente comunitaria y diputada de CABA, compartió en sus redes sociales un análisis que destaca la importancia de estos números. "El antisemitismo creció un 15% en 2024. Las redes sociales fueron clave en esa expansión", explicó, advirtiendo que muchos jóvenes consumen mensajes antisemitas disfrazados de "opinión" o "causa política". Para ella, esta tendencia es "mentira, es odio". La proliferación de estos discursos en plataformas como TikTok, Instagram y X (Twitter) es un fenómeno que potenció la normalización del odio, especialmente entre las generaciones más jóvenes, quienes se ven bombardeadas por mensajes sin el tiempo para reflexionar sobre ellos.
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Las agresiones físicas y el resurgir de discursos antiguos
En 2024, no solo aumentaron las denuncias en las redes sociales, sino que también se registró un significativo incremento de las agresiones físicas contra miembros de la comunidad judía. Se documentaron 10 incidentes de agresión física, lo que representa un aumento alarmante en comparación con los 3 casos reportados en 2023. Aunque el número absoluto sigue siendo bajo, la tendencia es preocupante: el odio antijudío está dejando de ser un fenómeno limitado al ámbito digital y empieza a manifestarse de forma más directa en el mundo real.
El informe también destaca un regreso de las formas más antiguas y virulentas del antisemitismo, aquellas que se asociaron históricamente con las ideologías nazis y con las teorías conspirativas sobre el control global por parte de los judíos. En 2024, estas expresiones se incrementaron, igualando en frecuencia a las relacionadas con el conflicto de Medio Oriente. Según la DAIA, estas ideas antisemitas, que habían quedado relegadas a círculos marginales, ahora emergen con mayor fuerza en sectores públicos como la política, los medios y la cultura. El resurgimiento de estos discursos de odio puso en evidencia la persistencia de prejuicios y estigmatizaciones que se creían superados.
El impacto de la guerra en Gaza y el contexto internacional
El informe también resalta cómo el conflicto en Gaza influyó directamente en el aumento de las expresiones antisemitas a nivel global y local. A partir de la masacre perpetrada por Hamas el 7 de octubre de 2023, las expresiones de odio hacia los judíos y el Estado de Israel aumentaron exponencialmente. En Argentina, este fenómeno se reflejó en un repunte en las denuncias, especialmente a partir de octubre de 2023 y en los meses cercanos al primer aniversario de la masacre. Sin embargo, a pesar del incremento en las denuncias, Argentina no fue escenario de la misma magnitud de violencia antisemita que otras naciones, como algunos países europeos.
A pesar de la relativa calma en comparación con otras regiones, la DAIA subraya que el antisemitismo en el país evolucionó. No se trata solo de un aumento en la cantidad de incidentes, sino de un cambio en la forma en que se manifiestan. El fenómeno ya no se limita a los comentarios aislados de grupos extremistas, sino que se infiltró en el discurso político y en las redes sociales, donde se normalizan las teorías de conspiración y los ataques a la comunidad judía bajo la apariencia de críticas al sionismo.
"Nuestra principal preocupación son las redes sociales, que juegan un papel central, especialmente en la manera en que los jóvenes son atiborrados de información sin tiempo para la reflexión y para procesarla, construyendo 'verdades' de a pedacitos en forma selectiva y muchas veces sin sustento", detallan en el informe de la DAIA.
Desafíos legales y educativos frente al antisemitismo
La DAIA también resaltó la necesidad de fortalecer las leyes y las políticas públicas para combatir el antisemitismo. En este sentido, la organización impulsó diversas acciones legales y legislativas para garantizar la protección de los derechos de la comunidad judía en Argentina. Esto incluye una mayor presión para que las autoridades judiciales tomen acciones más estrictas frente a los discursos de odio y las agresiones físicas.
En el ámbito educativo, la DAIA propuso una reforma en la Ley de Educación para que se incluya de manera obligatoria el tratamiento del antisemitismo, el discurso de odio y la lucha contra el terrorismo en todos los niveles educativos. La organización considera que la educación es una herramienta fundamental para combatir el antisemitismo, y que los jóvenes deben aprender a identificar y rechazar los prejuicios y las mentiras que circulan en las redes sociales y en el debate público.
El informe también hace hincapié en la importancia de fortalecer el pensamiento crítico en las nuevas generaciones. La DAIA cree que es crucial promover una educación que no solo aborde el antisemitismo, sino que también fomente valores de respeto a la diversidad y la convivencia democrática. Sin estos esfuerzos educativos, advierten, corremos el riesgo de que el odio persista y se profundice en el futuro.
Un panorama inquietante pero con avances importantes
Aunque los datos del informe de la DAIA pintan un panorama inquietante, también destacan que la comunidad judía en Argentina sigue siendo un ejemplo de integración y participación social. Si bien el aumento de las denuncias y las agresiones físicas es motivo de preocupación, Argentina sigue siendo uno de los países con menor violencia antisemita en comparación con otros países del mundo. A pesar de esto, la DAIA insiste en que es fundamental no bajar la guardia y continuar trabajando en conjunto con el gobierno, las instituciones educativas y la sociedad civil para erradicar el antisemitismo.
El informe concluye con un llamado a la acción. "Lo que no se registra, no existe", afirma la DAIA, subrayando la importancia de dar visibilidad al fenómeno del antisemitismo para que la sociedad pueda tomar conciencia y actuar en consecuencia. Solo a través de un esfuerzo colectivo y comprometido será posible reducir la propagación del odio y garantizar un futuro libre de discriminación para todos los argentinos.