Conseguir rentabilidades significativas con riesgo cero es un objetivo mucho más difícil de alcanzar en 2025. El nuevo escenario de recortes de los tipos de interés en la zona euro y en el resto de las grandes economías mundiales está provocando la contracción progresiva de los rendimientos de los depósitos a plazo y de las cuentas remuneradas.
Pero aún hay un último reducto de oportunidades que permiten conseguir rendimientos entre el 3% y el 4%. La gran pregunta es cuánto durarán estos productos en el escaparate comercial en las condiciones actuales.
Todo dependerá de la velocidad a la que el Banco Central Europeo (BCE) decida nuevas rebajas del precio del dinero, que según las previsiones se encamina en este nuevo año hacia la horquilla situada entre el 2% y el 2,5%.
En estos momentos, las opciones más atractivas en depósitos están en los plazos más cortos de dos y tres meses, aunque por encima del año aún se pueden encontrar tipos superiores al 3% que permiten asegurar rentabilidades significativas a medio y a largo plazo.
Las cuentas remuneradas, que tienen la ventaja de la liquidez inmediata, ofrecen rentabilidades máximas del 3,5% sin condiciones y del 5% en la modalidad de cuentas nómina.
En hipotecas, los compradores de casas ven cómo siguen mejorando las condiciones de los préstamos de la mano de la caída del euribor. Los mejores préstamos a tipo fijo y mixto se sitúan ya por debajo del nivel del 3,5% TAE (tasa anual equivalente, que recoge todos los gastos) y crece el número de hipotecas variables con diferenciales sobre el euribor inferiores el 0,5%.
En préstamos al consumo, hay tipos de interés muy competitivos por debajo del 6%, aunque la horquilla es amplia y depende del perfil del cliente, del importe de la operación y del plazo.
FUENTE: EXPANSIÓN-RIPE