Contexto
¿Qué hace a los bonos corporativos latinoamericanos tan atractivos?
La consultora Delphos Investment destaca que América Latina ofrece spreads ajustados por opcionalidad (OAS) en niveles superiores a los de Asia y EMEA (Europa, Oriente Medio y África). Mientras las regiones competidoras se encuentran en mínimos históricos, LatAm está por encima del decil inferior, lo que abre oportunidades interesantes para los inversores.
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Bonos
TIMOTHY A. CLARY / AFP
¿Qué países lideran dentro de la región?
Brasil y Chile sobresalen por su estabilidad macroeconómica y la calidad de sus emisores corporativos. Estos factores generan confianza entre los inversionistas que buscan altos rendimientos con riesgos controlados.
¿Cómo afecta la inflación a estos mercados?
La inflación en América Latina se ha moderado significativamente. Según Balanz Capital, en octubre de 2023 el promedio regional fue de 4,76%, muy por debajo del máximo del 10,5% alcanzado en 2021. Esto genera un entorno más predecible para inversiones a largo plazo. El análisis excluye a Argentina, que tiene un índice de precios al consumidor por encima del 190% anual.
¿Qué papel juega la inflación global en este escenario?
El proceso de convergencia inflacionaria ha sido más benigno de lo esperado. En mercados desarrollados, como los países del G10, la inflación promedio fue de 2,1% en octubre, muy por debajo del pico del 7,9% en 2022. Este contexto global favorece la estabilidad financiera, permitiendo a los inversionistas asumir riesgos calculados en regiones emergentes.
Cómo sigue
Los inversionistas globales podrían volcarse hacia LatAm para diversificar y capturar rendimientos superiores, especialmente en países con emisores corporativos sólidos como Brasil y Chile. Aunque la inflación ha mostrado señales de convergencia, los bancos centrales deberán mantener políticas que garanticen estabilidad para continuar atrayendo inversión extranjera.
La evolución de las tasas de interés en mercados desarrollados, como Estados Unidos, podría influir en las decisiones de inversión hacia Latinoamérica, especialmente si persisten los bajos rendimientos en bonos corporativos estadounidenses. Para mantener su atractivo, los países de la región deberán consolidar su estabilidad fiscal y fomentar la confianza en sus mercados financieros. Con estas dinámicas en juego, Latinoamérica podría seguir posicionándose como un destino clave para los inversores en busca de rendimientos elevados en un contexto global desafiante.