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Álvaro Garcé: "En muchas cárceles el control lo tienen" los presos
El director designado de Inteligencia y Estrategia del Estado, Álvaro Garcé, dijo que el sistema penitenciario uruguayo está en crisis y opinó que la inteligencia para las cárceles está "muy mermada", aunque reconoce los esfuerzos que se realizaron. "En muchas cárceles el control lo tiene los privados de libertad y eso no puede ocurrir", dijo al programa Quién es Quién de Diamante FM y Televisión Nacional.
Para el asesor en seguridad del presidente electo Luis Lacalle Pou, que haya 12 mil presos en Uruguay "habla mal" del país porque da cuenta de una "gran impunidad" y un "sistema penitenciario sobrecargado". "Son dos problemas que hay que resolver con una buena política criminal", opinó Garcé.
El nacionalista cree que las cárceles uruguayas son un territorio en donde se planifican delitos que se ejecutan afuera lo que considera "inadmisible para el estado de derecho".
"La inteligencia penitenciaria es uno de los elementos a fortalecer. Hay que manejar los recursos que la ley establece para obtener información de calidad y a tiempo real", afirmó.
Consultado sobre si los presos no deben tener celulares, dijo que sugiere que "se elimine cualquier circuito de información que sirva para la comisión de delitos". Si el preso "está en un régimen de seguridad cerrada o media no tiene ningún sentido que tenga un celular", explicó. Sin embargo, aclaró que la situación de las personas que trabajan en una chacra, por ejemplo, es distinta.
"Lo que hay que hacer es un equilibrio entre la seguridad y los derechos de las personas. El equilibro se logra interceptando los canales ilícitos de comunicación y reforzando los canales lícitos", explicó.
Garcé puso el ejemplo de los países "más avanzados" que utilizan teléfonos fijos en las cárceles para que los presos puedan tener la "accesibilidad necesaria" para poder comunicarse. Esta idea es la que sugerirá cuando asuma el gobierno de Lacalle, el próximo 1° de marzo.
El excomisionado parlamentario para las cárceles dijo que la "inteligencia es clave" para combatir organizaciones criminales como el Primer Comando Capital, la poderosa banda criminal brasileña.
Sobre este punto fue consultado sobre la utilización de infiltrados dentro de las organizaciones del crimen y opinó que son "un arma de doble filo", aunque aclaró se van a utilizar "todos los recursos que prevé la ley".
Garcé prefiere no llamar infiltrados a estos informantes sino "fuentes cerradas". "Es una persona que bajo la supervisión estricta del director de inteligencia, el Estado emplea reservando su identidad", explicó.
