Comisión anunció que superó la meta y entregó 797.261 firmas contra la LUC

Tanto Michelini como Marcelo Abdala, secretario general del PIT CNT, destacaron el rol clave que tuvo la "militancia de a pie" en esta "hazaña". "El pueblo uruguayo ha tenido hazañas de todo tipo, hizo 15 días de huelga cuando vino el golpe militar. Tuvo un plebiscito por 'no' en plena dictadura. Esta es otra de las hazañas que hemos hecho", comparó el exlegislador. 

Abdala definió lo sucedido como un "tsunami democrático" y un "terremoto político" que genera una "inflexión". "El pueblo dio una señal clarísima, una ley votada a ritmo de vértigo que no trae una cuestión urgente, como mandata la constitución, sino que versa un proyecto de país el pueblo se para y dice 'no, yo quiero decidir' y tiene ese derecho", expresó y recordó una de las más ilustres frases de José Gervasio Artigas: "Su prioridad emana de vosotros y ella cesa ante vuestra presencia soberana". 

Además, les respondió a "todos los que de una u otra manera cuestionan la acción y la legitimidad de las distintas organizaciones sociales y políticas y en particular del PIT CNT".  "Aquí hay un enorme respaldo a un planteo que tuvo origen en el movimiento sindical", subrayó. 

Las firmas se entregaron en la tarde tras una caravana desde la sede del PIT-CNT en Jackson y Charrúa, subió por Guaná y recorrió 18 de julio hasta la Plaza Independencia. Con escolta policial, las firmas se cargaron en un camión y los militantes tenían prohibido bajar del auto, a excepción de 15 representantes encargados de entregarlas en la Corte, organismo que deberá validarlas y que podrá convocar al referéndum una vez que haya completado el proceso. Sin embargo, se vio a mucha gente fuera de los vehículos.

En una conferencia de prensa llevada a cabo este mediodía en la sede del PIT-CNT, Fernando Pereira dijo que quería saludar a todos los que firmaron para derogar la LUC e incluso a los que no habían firmado pero que los habían respetado en sus argumentos. "La gente sabe más de la LUC por la campaña que hicimos que por la discusión en el Senado", aseguró y agregó que democratizaron "el conocimiento de una ley que es regresiva para el pueblo uruguayo".

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"Ganaron los militantes de pie, los que se animaron a ir mano a mano a hablar sobre la ley, los que no escatimaron en estudiar para al otro día fundamentar, los que leyeron los 135 artículos y los salieron a defender. Son los ganadores de este primer tiempo de un partido que va a ser más largo. Hoy empieza el segundo tiempo y hay que jugarlo con la misma amplitud que jugamos el primero (...) La disputa no es con la República, es con una ley que es pésima", afirmó y mostró una papel con el total de firmas contabilizadas en la mañana de este jueves que eran un total de 763.443.

A su vez, la representante de la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU), Camila Fagúndez, dijo que el "día de hoy es un pequeño recorrido de lo que ha sido estos meses para construir esta pequeña victoria". "Obviamente que la emoción desborda y queremos decir bien fuerte y claro que habrá referéndum", aseguró en el medio de los aplausos.

En el organismo electoral, "lo primero que se hace es recibirlas, labrar un acta en presencia de los promotores y esas cajas quedan archivadas en un cuarto especial bajo llave", relató el presidente de la Corte, José Arocena. Allí la Corte Electoral procede a la numeración, que consiste en contar la cantidad de firmas recolectadas. El mínimo requerido era del 25% del total de inscriptos habilitados para votar. Arocena explicó que dicho porcentaje se calculaba el día de la entrega, dado que "el padrón varía todos los días".

Una vez contabilizadas las firmas –"si la numeración está muy cerca (del mínimo), igual se coteja", apuntó Arocena–, comienza el proceso de contraste con el Registro Cívico, para el que la Corte dispone por ley de 150 días hábiles para la validación, aunque puede culminarlo antes.

La tarea será llevada adelante por 46 parejas de funcionarios formadas por un dactilóscopo y un idóneo de dactilóscopo –funcionarios administrativos del organismo capacitados para desempeñarse en el oficio. Los técnicos supervisarán que no haya irregularidades en las huellas dactilares, las firmas, números de credenciales y las buenas condiciones de las rúbricas, de modo que puedan ser cotejadas con el Registro Cívico.

Una vez culminado el análisis firma a firma, la Corte Electoral resuelve si cumplió con las exigencias, lo que permitirá entonces proceder a convocar la consulta popular. La celebración de esa instancia "deberá realizarse dentro de los 120 días siguientes al de la proclamación que el recurso fue interpuesto en tiempo y forma", según las leyes electorales. Eso implica que, en caso de validarse las firmas, pasarán como máximo unos nueve meses para la votación.

Fernando Pereira había anunciado en la mañana de este jueves que ya tenían 700 mil firmas, según dijo al programa Desayunos informales, de canal 12.

Aclaración: Una versión anterior de esta nota afirmaba que la realización de la consulta popular no cuenta con un plazo determinado, pero eso no es así. Según las leyes electorales, el referéndum deberá ser convocado en un período de 120 días a partir de su validación. A los lectores y los involucrados, las disculpas del caso.